Reducir costes es uno de los objetivos más importantes de cualquier pyme. Si no tenemos una idea clara de por dónde debemos empezar puede resultarnos complicado, pero lo cierto es que es bastante sencillo si damos los pasos adecuados.
En este artículo os vamos a dejar una serie de recomendaciones en forma de cosas que debéis hacer antes de lanzaros a imprimir si queréis reducir costes en vuestra pyme. Lo ideal es aplicar todas estas recomendaciones de forma simultánea, ya que de esa forma maximizaréis sus efectos y conseguiréis reducir en mayor medida vuestros costes de impresión.
- ¿Realmente necesitas imprimir? Es una pregunta fundamental, sobre todo en el caso de documentos que vayan a tener una vida útil muy corta y que no vayan a salir de nuestra pyme. Para estos casos es mejor optar por visualizarlos en formato digital, ya que accederemos igualmente a su contenido y ahorraremos papel y tinta.
- Configurar color y calidad: no todos los documentos de nuestra pyme tienen que ir impresos en color, y tampoco con el mismo nivel de calidad. Utilizar adecuadamente los ajustes de calidad y de color es básico para reducir costes de impresión, y de forma notable. Por ejemplo los documentos internos y los bocetos pueden ir en monocromo y en modo borrador en la mayoría de los casos, mientras que los trabajos importantes que sean definitivos y vayan dirigidos a clientes deberán estar en calidad alta y en color si es necesario (documentos con imágenes, por ejemplo).
- Ajusta bien la fuente: es sencillo pero importante. La fuente utilizada puede elevar el consumo de tinta como vimos en este artículo, y si además resulta inapropiado para el documento que hemos imprimido éste podría acabar directamente en la basura.
- Comprueba el papel: también es básico pero a veces es fácil pasarlo por alto. Antes de imprimir es bueno echar un vistazo al papel para ver que está en buen estado y que estamos utilizando el tipo que realmente necesitamos para el trabajo que vamos a realizar.
- Piensa si puedes imprimir a doble cara: hay trabajos que por su propia naturaleza no podemos realizarlos a doble cara, pero también hay muchos otros que sí. Antes de imprimir debemos plantearnos si podemos aprovechar este modo, ya que a la larga nos ayudará a reducir el consumo de papel y los costes de impresión.