La startup española, Keybotic, anunció el cierre de una ronda de financiación en etapa semilla, valorada de 3 millones de euros. La inversión ha sido liderada por dos family offices de España del sector industrial y tecnológico.
Los recursos obtenidos en la ronda de financiación le permitirán desarrollar su área de negocio, marketing y ventas e incorporar perfiles enfocados en estas disciplinas. En paralelo, Keybotic también reforzará su equipo con la ampliación de la plantilla de ingeniería especializada en robótica.
Irene Gómez, cofundadora y CEO de Keybotic, ha señalado que “estamos muy satisfechos con la ronda de financiación porque valida nuestro modelo de negocio Raas (Robot as a Service) y nos dota de músculo financiero para proseguir con nuestro crecimiento en sectores estratégicos para la compañía”. Gómez ha añadido que “queremos agradecer a los inversores su respaldo y confianza; este impulso avala el potencial de Keyper y nos permite incrementar nuestra capacidad de producción para afrontar una nueva fase enfocada a la comercialización de nuestro perro-robot y a la ampliación de nuestra cartera de clientes en sectores industriales”.
La robótica autónoma, un activo para la industria
Keybotic se ha especializado en diseñar y fabricar perros-robot autónomos para detectar incidentes como fugas de gases y vapores, leer instrumentos, así como enviar alertas en tiempo real. Gracias a la fusión e interpretación de datos, Keybotic permite predecir y detectar incidentes digitalizando las instalaciones de todas las plantas industriales.
Con ello, la startup permite aumentar la productividad y seguridad del personal de las compañías industriales, a la vez que se minimizan riesgos, gracias a su avanzada tecnología. Para ello, Keybotic provee a la industria de una solución integral end-to-end, ya que no solo fabrican a Keyper sino que dan la solución final al cliente que además funciona desde el primer momento, sin necesidad de implementación.
Su perro-robot inspecciona sin ninguna interacción humana, de forma totalmente autónoma, realizando rondas de seguridad y mantenimiento en entornos muy complejos con escaleras, grava, desniveles y tuberías. Asimismo, detecta incidentes y envía alertas al centro de control. Además, ofrece imágenes para tener control en todo momento de las instalaciones industriales y tiene la capacidad de coordinarse con múltiples perro-robots Keyper para realizar las tareas de manera más eficiente.