Los planes de retribución flexible se adaptan a las necesidades de los empleados, lo que permite combinar los servicios de la manera que estos prefieran en virtud de sus demandas. De este modo, la retribución flexible puede incluir diferentes tipos de servicios, entre los que destacan el cheque restaurante, la tarjeta transporte o el cheque guardería. A continuación, vamos a repasar los más importantes:
Cheque restaurante
Quizás sea el servicio de retribución flexible más popular, ya que hace referencia a una actividad que deben realizar los empleados todos los días. El cheque restaurante permite al trabajador elegir entre la red de establecimientos asociada a la empresa con la que tiene contratados los servicios su organización, su restaurante favorito.
A través de este ticket, puede disponer de un gasto de hasta 11 euros diarios, exentos de IRPF, lo que supone un ahorro considerable. Además, los nuevos modelos de trabajo, también son tenidos en cuenta ya que las ayudas del cheque restaurante no pueden ser eliminadas con el teletrabajo, tal y como han determinado diferentes sentencias de la Audiencia Nacional. El objetivo es que los empleados ahorren el tiempo y los recursos que habitualmente se emplean en preparar la comida.
Tarjeta transporte
Especialmente útil en las grandes ciudades como Madrid o Barcelona donde los empleados se desplazan a su centro de trabajo habitualmente en autobús, metro o tren. Esta exención fiscal es de hasta 136,36 euros mensuales por trabajador, lo que se traduce en un tope anual de 1.500 euros por persona.
Asimismo, este servicio fomenta el transporte público, para desplazarse de una manera cómoda y sostenible por la ciudad, contribuyendo a la reducción del número de emisiones y a fomentar una economía más sostenible.
Cheque guardería
Estas ayudas, como su propio nombre indica, están destinadas exclusivamente a padres con hijos, que tengan entre cero y tres años. Esta retribución no solo afecta de manera determinante en el ámbito económico sino que también contribuye a la conciliación familiar, ya que es una necesidad que tienen las parejas trabajadoras con descendencia.
Seguro médico
Es uno de los productos más demandados, especialmente desde la situación generada por la pandemia, circunstancia que repunta ante la saturación de los servicios públicos. Este producto puede aplicarse tanto al propio trabajador como a familiares, entre los que se incluyen el cónyuge y los descendientes.
Las empresas pueden deducirse del Impuesto de sociedades hasta 500 euros por cada trabajador que haya asegurado. Los empleados, por su parte, no tributan por este concepto hasta los 500 euros anuales.
Formación
Es un producto muy apreciado por el trabajador, ya que cada vez demanda más ayudas relativas a la formación, ya sea en idiomas o en otros asuntos relacionados con su profesión. Otra opción es que la formación tenga lugar dentro de la propia organización. Esta es una manera de mejorar la productividad y la superación del equipo humano. Además, favorece la atracción y la retención de talento.