Estos dos años el ecosistema empresarial español ha aprendido mucho sobre cómo debe articularse en el futuro para sobrevivir y crecer con sus modelos de negocio. Y para ello, el principal cambio que han percibido como esencial para instalarse en este nuevo escenario con solvencia es la digitalización.
Antes de la pandemia, las voces más expertas alertaban de la necesidad de cambiar al entorno online y digital para obtener ventajas competitivas. Pero esa obligación cambio el tiempo verbal para pasar de hablar de un futuro para posicionarse en el presente más inmediato. Sobrevivir o no pasaba por tomar medidas que siempre tenían nuevas herramientas digitales a la cabeza.
«En el día a día vemos cómo las pymes le están perdiendo el ‘miedo’ a esta digitalización, pero todavía nos enfrentamos a algunos sectores más tradicionales que no acaban de creer en este cambio, sobretodo porque piensan que la digitalización supone la pérdida del trato humano con profesionales, pero esto es incorrecto”, destaca Yoann Artus, country manager de PayFit, la startup dedicada a la digitalización y automatización de tareas en el área de Recursos Humanos, y recientemente nombrada unicornio tecnológico.
De esa situación, las empresas españolas (en más de un 99% pequeñas y medianas) aprendieron la lección y dieron un paso adelante. Según un estudio realizado por GoDaddy, el 76% de las pymes ya tiene entornos digitales (siendo el 28% pioneras digitales, el 26% asentadas digitales y el 22 restante iniciadas).
Cómo debe ser el proceso de digitalización
Para aquellas empresas que tienen que realizar cambios en su estructura, estos deben implementarse con cierto orden y, sin duda, el área de Recursos Humanos es una prioridad absoluta para articular sobre este departamento cualquier cambio. Más aún si afecta a toda la plantilla y su forma de trabajar. “La transformación digital en el ámbito laboral y de RRHH supone un proceso de mejora y optimización de procesos que no obliga a renunciar al trato humano”, afirma Yoann Artus.
Además de tener esto claro, cada empresa debe realizar un ejercicio de introspección para evaluar por dónde debe llevar a cabo esta transformación. Cada pyme tiene unas necesidades y no todos los sectores demandan las mismas herramientas para realizar estos cambios. “Una vez la empresa conoce sus prioridades y necesidades a optimizar, puede empezar a investigar cuales son las herramientas digitales que le van a ayudar a hacer este cambio. Actualmente existen software de todo tipo: para gestionar gastos profesionales, stocks, tesorería… Nuestro consejo es que empiecen por lo más importante para su negocio”, continúa analizando el country manager de la compañía.
De hecho, para la startup de origen francés todo este cambio debe realizarse teniendo en cuenta múltiples factores que van más allá del organizativo. Por ello, señalan que es necesario que “las pymes detecten la necesidad de optimizar su departamento de Recursos Humanos, ese es el primer paso. Un software de recursos humanos sirve tanto para optimizar la gestión de temas de personal como para incrementar la satisfacción de los empleados”.
Por otro lado, advierten como prioritario el aspecto económico y la investigación del mercado para conocer los diferentes proveedores que existen. “En poco tiempo las pymes se dan cuenta de la comodidad que aporta y los beneficios frente a su forma de trabajar previa”, concreta Artus desde la experiencia de los miles de clientes con los que cuenta su empresa.
En este sentido, el principal cambio debe ser de mentalidad frente a las soluciones que nos puede aportar el entorno digital. Un cambio que no puede realizar únicamente la directiva, ya que, sin hacer partícipe a toda la plantilla, estará abocado al fracaso. Solo de esta forma conseguirán que las empresas optimicen los procesos más mecánicos y repetitivos para maximizar su modelo de negocio y alcanzar mayores beneficios.
