Desde aquel día en que Pedro Sánchez llegaba al Consejo de Ministros entre aplausos y vítores por sus Ministros, tras las reuniones europeas para el reparto de fondos, la maquinaria empresarial española se puso manos a la obra para no dejar pasar esta oportunidad.
Uno de los primeros pasos de los negocios, castigados por la pandemia y la bajada en la actividad económica, ha sido buscar información sobre cómo optar a estas ayudas. Aunque aún está todo en el aire y los trámites conllevarán mucha burocracia, ya sabemos algunos detalles del plan, como que el dinero irá destinado a proyectos de digitalización y ecología, principalmente. Como decíamos en este artículo, más del 90% de las empresas que optan a las ayudan son micropymes con menos de nueve trabajadores, que necesitan apoyarse en empresas consultoras para el desarrollo y la gestión de los proyectos elegibles.
Pero también las grandes empresas quieren su «trozo del pastel». Así, según leemos en Economía Digital, Adif y Adif-Alta Velocidad buscan una consultora que monitorice estas inversiones europeas. El organismo público, dependiente del Ministerio de Fomento, busca un equipo de consultores compuesto por, al menos, cuatro miembros: un coordinador del contrato, un delegado del consultor, un consultor senior y un consultor junior.
Entre los principales candidatos se encontrarían «gigantes» como PwC, EY, KPMG y Deloitte (conocidos como las Big Four) que ya son viejos conocidos a la hora de optar a millonarios contratos con la administración. También son las favoritas para analizar y gestionar las opciones de las empresas del IBEX a los Fondos de Recuperación.
Plan de trabajo
Según Economía Digital, el importe de los trabajos de consultoría ascendería a medio millón de impuestos más IVA, e incluiría nueve meses de trabajo. Los dos primeros meses serían para definir la oficina del proyecto de Mecanismo de recuperación y resiliencia (MRR) a la que presentar las candidaturas.
Tras esto, comenzaría una segunda fase de cuatro semanas para definir el cuadro de mando. Por último, el resto del tiempo se dedicaría a la elaboración de informes. Estos documentos podrían ser distribuidos entre Adif, el Ministerio de Hacienda, Transportes y la oficina del Plan de recuperación, entre otros.