Cuando hacemos referencia a las nuevas tendencias en los medios de pago es imposible no pensar en la pandemia. La COVID-19 ha acelerado los cambios que ya se estaban produciendo, conduciendo a la aparición de nuevos competidores, nuevas necesidades y expectativas de los consumidores, así como un ritmo de digitalización más rápido de lo que nadie podía imaginar.
El comportamiento del usuario está dando lugar a una larga lista de tendencias en los medios de pago. Según un informe de Capgemini, el teléfono móvil se convirtió durnate 2020 en el medio indiscutible de los usuarios para realizar transacciones.
“La banca por internet y las transferencias directas de cuentas fueron el método de pago preferido durante la crisis, según el 68% de los encuestados. Los pagos sin contacto (tap-to-pay) ocuparon el segundo lugar, de acuerdo con el 64% de los que dijeron que las usaban con frecuencia, y los servicios de banca móvil (incluidos los pagos basados en QR) fueron la opción preferida del 48% de los encuestados”, describe este informe.
La pandemia de la COVID-19 ha impulsado la digitalización de todas las áreas de negocios y de la sociedad, ya que nunca antes la industria había visto un cambio tan contundente en tan poco tiempo. La necesidad de evitar el contacto ha impulsado transformaciones para las marcas en meses que podrían haber llevado años. Dapp Payments predice cuatro tendencias en los medios de pago de cara a los próximos meses:
1) El contactless, cada vez más presente
La pandemia obligó a las empresas a encontrar formas de minimizar el contacto físico necesario para completar una transacción. Esto ha llevado a un aumento en el uso de tarjetas digitales y sin contacto.
2) Crecen los pagos con código QR
Un verdadero y efectivo pago sin contacto ha sido el código QR, que ha demostrado su resistencia en este período, especialmente en mercados emergentes. A diferencia de las transacciones con tarjeta que requieren que los comerciantes inviertan en terminales de punto de venta costosos y complejos, los códigos QR son económicos de implementar y fáciles de usar.
3) El modelo de suscripción, en auge
Las marcas de consumo recurren cada vez más al modelo de suscripción. Los clientes pagan una tarifa anual que los impulsa a comprar más. Por su parte, el pequeño comercio buscará apropiarse de la relación con el cliente y los datos que la acompañan.
4) Los retailers se digitalizarán
Aunque han respondido bien a la pandemia, su trabajo no ha hecho más que empezar, ya que la diversificación de los pagos será un paso crucial en el futuro más inmediato.
Mientras los consumidores sigan adoptando el e-commerce o interactuando con pequeños comerciantes a quienes no se había llegado antes, existirá una creciente demanda para introducir nuevos métodos de pago digitales.
Estos promoverán las transacciones, garantizando la seguridad y protección de los clientes, mediante diversos métodos que lo garanticen como las tarjetas biométricas de huellas dactilares, el escaneo o el pago con el smartphone, junto a una variedad de opciones de pago con tarjeta más tradicionales, ayudando a crear un universo donde el consumidor puede tomar una decisión basada en conveniencia, personal preferencia y sabiendo que están protegidos contra el fraude financiero.