Pese a la irrupción de la pandemia de la COVID-19 y a la crisis económica que se nos viene encima derivada de esta problemática, las fintech siguen estando muy de moda. No obstante, la inestabilidad que provoca la situación actual hace muy difícil acertar con las previsiones de cara al futuro más inmediato.
Pero, si por algo se ha caracterizado este 2020 ha sido por la pujanza de la tecnología. En época de confinamientos ha sido uno de los pocos sectores que ha salido fortalecido.
De cara a 2021, hay diferentes tendencias que se pueden estabilizar, sobre todo porque son de fácil adaptación a la ´nueva realidad´. Vamos a repasarlas a continuación.
Blockchain
La tecnología blockchain desde sus inicios se ha colocado como garante de la transparencia y herramienta clave para poder sostener las monedas virtuales como el Bitcoin. Ahora sus aplicaciones se han diversificado en sectores como el sanitario o el almacenamiento en la nube. El prometedor futuro de la tecnología blockchain puede que esté más ligado a otros sectores que el de las criptomonedas, y la crisis actual está ayudando a ponerlo de manifiesto, tal y como destaca la web Stockcrowdin.
Cambios en los hábitos de consumo
El consumo online se ha disparado en todos los sectores durante la crisis del coronavirus. Gigantes como Amazon han contratado a 175.000 personas en plena pandemia y han tenido problemas para satisfacer la demanda en algunos momentos. El consumo en restaurantes, por ejemplo, ha cambiado por completo durante algunos meses y los cierres perimetrales que han vuelto con la segunda ola les han obligado a reinventarse.
La compra de ropa, muebles, aparatos para la práctica deportiva y ordenadores así como de otros aparatos tecnológicos ha crecido considerablemente desde que empezó la pandemia. Es probable que muchas de estar personas que han recurrido en masa a la compra online mantengan al menos parte del hábito para consolidar el ecommerce, y por lo tanto, los pagos electrónicos, definitivamente en todos los segmentos.
Neobancos
Los llamados neobancos son entidades bancarias sin oficinas físicas. En su mayoría, estos neobancos permiten realizar todas las operaciones a través de su app, y ni siquiera es necesario entrar en su página web. Esta tendencia venía estando al alza desde antes de la pandemia, ya que muchas entidades han ido progresivamente prescindiendo de sus sucursales, para cambiar la oficina física por una oficina virtual en muchos casos o por la implantación de la atención telefónica.
Parece bastante claro que, con la tendencia a las sociedades occidentales a realizar todos los pagos por tarjeta o por el teléfono móvil, estos se encuentran perfectamente posicionados para ir acaparando cada vez más cuota de mercado a los bancos tradicionales. Monzo, Revolut o Qonto son los que ahora mismo están mejor posicionados.
Según un estudio del neobanco alemán N26 sobre las preferencias bancarias de los españoles, un 50% cree que en los próximos cinco años desaparecerán los cajeros y el dinero en efectivo, y más de un 70% está dispuesto a abandonar ahora el dinero en metálico. Datos que indican cambios en profundidad y que prefiguran una posible disrupción del sector de la banca tradicional.
Crowdlending
En un contexto de necesidad de acceder al crédito, la tendencia a buscar vías alternativas o complementarias a la bancaria por parte de los promotores inmobiliarios va en aumento. Desde el 2015 el crowdlending crece en dobles dígitos en todo el mundo, y esta tendencia no va a hacer más que acelerarse en los años siguientes gracias a la necesidad de digitalización de la financiación que esta vía provee.
Inteligencia Artificial, Big Data y Machine Learning
La Inteligencia Artificial hace años que está impactando en todos los sectores, especialmente en el sanitario, y esta crisis ha impulsado todavía más la tendencia. Pero las empresas Fintech también la están adoptando, y entre otras utilidades se usa para crear perfiles de riesgo automatizados de clientes, actuar como asistente digital para usuarios de plataformas tecnológicas, o elaborar modelos de riesgo para proyectos inmobiliarios.
Además, hay otras tecnologías que llevan tiempo en el mercado pero esperan su momento álgido como el Big Data, o el Machine Learning que pueden aportar mucho a la tecnología financiera. La atención a clientes automatizada, recolección de datos para crear experiencias de venta personalizadas o directamente nuevos productos y la no dependencia de los bancos son algunas de las ventajas, como apunta Paynopain.