No es que sea exactamente una sopresa. Pero «The information» ha confirmado lo que muchos sospechaban: prácticamente nadie utiliza el altavoz inteligente de Amazon para realizar compras on-line.
Como explica la publicación americana, aunque se han vendido hasta el momento más de 50 millones de unidades de dispositivos Amazon Echo ( y sus distintas variantes como Amazon Echo Dot o Amazon Show), únicamente 100.000 usuarios han realizado más de una compra hablando directamente con Alexa.
La inmensa mayoría de los usuarios utilizan este y otros altavoces inteligentes sobre todo para tareas relacionadas con su ocio personal, como escuchar música o para informarse sobre cuestiones muy concretas. Además un grupo importante de usuarios también utiliza estos dispositivos como centro de su hogar conectado, controlando otros dispositivos como termostatos o sistemas de iluminación inteligentes.
Para Amazon, la lectura de estos datos es mixta. Por un lado la multinacional americana tiene que asumir que sus usuarios no están de momento dispuestos a realizar compras por impulso sin ver antes el producto que van a comprar. Podrían hacerlo para productos muy concretos (como «Alexa compra dentrífico») pero no parece que sea un fenómeno que vaya a ir más allá.
Pero por otro, Amazon sí que ha demostrado que su Alexa puede servir de catalizador para otro tipo de ventas cruzadas, como pueden ser suscripciones a servicios de música como Amazon Music o de audio libros como Audible que también pertenecen a la compañía.