Afirma Nassim Nicholas Taleb (autor del bestseller El cisne negro: El impacto de lo altamente improbable) que «Solo en la historia reciente ‘trabajar mucho’ se ha considerado un orgullo más que una vergüenza». Y no es el único. La lógica del trabajo que arrastramos desde la revolución industrial está siendo puesta cada vez más en entredicho. Autores como Tim Ferriss se han hecho mundialmente famosos gracias a libros como «La semana laboral de 4 horas», mientras que otros como Carl Honoré y su «Elogio de la lentitud» apelan a un modo de vida más relajado como clave para ese menos es más.
En esta línea de pensamiento se encuentra «Descansa, produce más trabajando menos», el nuevo libro de Alex Pang, conocido consultor de empresas en Silicon Valley y que quiere convencernos que sólo aprendiendo a descansar podemos tener éxito en la mayoría de facetas de nuestra vida.
Su planteamiento es sencillo: actualmente y en el mundo en el que vivimos, el trabajo y el ajetreo están a la orden del día y el descanso ha pasado a un segundo plano, olvidándonos de lo que realmente significa y de lo importante que es.
Tal y como expone Pang en su obra, el descanso no es simplemente la ausencia de trabajo, sino que es algo que tiene su propia consistencia y cualidades y que tenemos que aprender a usar bien. ¿A qué se refiere con eso de que tenemos que aprender a utilizar el descanso bien?
A que normalmente, estamos tan agotados en los pocos momentos que tenemos de relax, que terminamos pegados a la televisión o navegando por Internet sin saber exactamente qué es lo que buscamos. No deberíamos considerar el descanso como una mera necesidad física que hemos de satisfacer a regañadientes, sino como una oportunidad.
Una oportunidad para ser más creativos, descubrir cómo en realidad podemos ser más productivos sin trabajar tantas horas y sin hacer grandes esfuerzos. La importancia de andar, de dormir la siesta, de parar a media mañana o de volver a aprender a comer, son algunas de las claves que desgrana en la obra.