En apenas cuatro años Azimo ha conseguido convertirse en referente en envío y recepción de dinero a través de internet. Se utiliza en más de 190 países, cuenta con un millón de emisores y receptores que se conectan a la aplicación y es una de las startups más prometedoras del momento.
Marta Krupinska nos cuenta cómo esta empresa surgió de una necesidad propia –“trabajaba en Dublín y había comprobado por mi misma lo difícil que era enviar dinero”– y de qué manera está consiguiendo hacer realidad lo que soñó un día, el “cambiar radicalmente” las transacciones monetarias entre inmigrantes y sus familiares y/o seres queridos.
MuyPymes: Azimo llega al mercado presentándose como ‘la mejor manera de transferir dinero’. ¿En qué consiste exactamente esta aplicación?
Marta Krupinska: Lanzado en 2012, Azimo es un servicio digital de transferencias de dinero internacional. Es un servicio rápido, sencillo y seguro que cuenta con la red digital más grande del mundo, permitiendo a nuestros consumidores enviar dinero a más de 190 países desde cualquier dispositivo conectado a internet.
MuyPymes: ¿Cuál es el funcionamiento de Azimo?
Marta Krupinska: Desde el punto de vista del usuario, todo lo que tiene que hacer es entrar en nuestra web o app, seleccionar cuánto dinero quiere transferir, introducir todos los detalles del destinatario y adónde va el dinero ¡y listo!
Por nuestra parte, el modelo de Azimo está construido sobre unas bases de pre-financiación, por lo que en la mayoría de los casos, una vez tenemos el pago autorizado, el dinero está listo de forma prácticamente inmediata. Usando este modelo, llevamos los retrasos en la entrega hasta el mínimo y así aseguramos que el dinero llega siempre a su destino.
MuyPymes: ¿Cuánto cuesta enviar dinero a través de Azimo?
Marta Krupinska: La tasa depende del destino al que se envía el dinero y del país desde el que se hace, pero, para que os hagáis una idea, nuestras tasas son un 10% menores que las de nuestra competencia. No trabajamos con agentes ni distribuidores, por lo que no tenemos a nadie con quien compartir las comisiones. Vamos directamente al consumidor, por lo que podemos reducir gran parte del coste.
Al no tener ningún tipo de intermediarios pueden ofrecer precios más económicos, hasta un «10% menores que las tasas de nuestra competencia».
MuyPymes: ¿Qué ventajas competitivas aportáis al consumidor?
Marta Krupinska: Si te paras a pensar en la forma en la que tradicionalmente han operado las compañías del sector, te darás cuenta de que tienen establecimientos en cada esquina. Cuentan con agentes que se encargan de gestionar su red de establecimientos y compañías, y ganan mucho dinero. Western Union ganó mil millones de dólares en flujo de caja del capital el año pasado. Es un negocio enorme. Nosotros reducimos esta cadena a la mitad. No tenemos agentes, no tenemos a nadie con quien compartir las comisiones. Vamos directamente al cliente y nos ahorramos muchos costes. En el mundo offline, este es un proceso mucho más manual. No le estamos diciendo a la gente que haga cosas que no hace ya, les estamos permitiendo hacerlas con Azimo que es mucho más barato, rápido y sencillo.
En segundo lugar, invertimos mucho en nuestra tecnología y estamos enfocados en mejorar el sistema y conseguir que funcione más rápido para el usuario final. Por ejemplo, sabemos que el 73% de los remitentes de Reino Unido usan Facebook, que es sin duda el medio preferido por una gran mayoría para estar en contacto con sus familiares y amigos. Por ello, hemos firmado un acuerdo con la compañía para ofrecer transferencias de dinero a través de Facebook Messenger. Para nosotros se trata de una cuestión de permitir a nuestros consumidores enviar dinero en cualquier momento y desde cualquier lugar.
MuyPymes: ¿Cuánto tiempo llevaba gestándose la idea de crear Azimo? ¿Cómo detectasteis que era necesaria?
Marta Krupinska: Azimo fue creado por mí misma, Michael Kent y nuestro anterior CTO, Marek Wawro. Michael había creado previamente Small World Financial Services desde sus cimientos y se convirtió en una compañía valorada en 4.500 millones de dólares. En esos momentos, yo trabajaba en Dublín y había comprobado por mí misma lo difícil que era enviar dinero. Quería enviar una parte de lo que ganaba a casa para ayudar a mi madre, que estaba en Polonia, y me di cuenta de que era más barato comprar un billete de avión y llevar el dinero por mí misma que pagar las tasas de los servicios de envío. Michael y yo llegamos a la conclusión de que la expansión de los dispositivos móviles y el aumento de las expectativas digitales por parte de los consumidores deberían unirse para proporcionar un servicio de transferencias de dinero desde cualquier lugar y en cualquier momento, por el que no hubiera que pagar enormes cantidades de dinero. Así que decidimos crear Azimo para cambiar radicalmente la forma en la que la gente que vive en el extranjero pueda enviar dinero a su familia y amigos. Cuatro años después, con un millón de emisores y receptores conectados al servicio, seguimos haciendo justo eso.
MuyPymes: A día de hoy, ¿con cuántos clientes contáis?
Marta Krupinska: Actualmente tenemos un millón de emisores y receptores conectados a la plataforma
MuyPymes: ¿En qué países operáis? ¿Hasta dónde queréis llegar? ¿Qué mercados tenéis en mente?
Marta Krupinska: Nuestros usuarios pueden enviar dinero desde 24 países en toda Europa a más de 190 países en todo el mundo. Acabamos de expandir nuestra red a Suiza y Noruega y actualmente estamos muy focalizados en Europa, donde los costes de envío son todavía muy altos.
Seguimos también buscando nuevas formas de ofrecer a nuestros consumidores un servicio mejor. ¡Tenemos novedades muy interesantes! Como nuestro acuerdo con Facebook para integrar Facebook Messenger en nuestro servicio, permitiendo a nuestros consumidores realizar transferencias a cualquiera de sus contactos de Facebook a través del canal social. Hemos lanzado también un chat bot de atención al cliente para que nuestros usuarios puedan informarse de manera rápida de las tarifas y los métodos de envío sin tener que enviar un email o permanecer en espera en una llamada.
Han alcanzado un acuerdo con Facebook para integrar su servicio en el Messenger de la red social. Esto permitirá a los consumidores hacer transferencias monetarias a cualquiera de los contactos que tengan en este medio.
MuyPymes: A medio y largo plazo, ¿cuáles son los objetivos de la empresa? ¿Con qué facturación esperáis cerrar 2017?
Marta Krupinska: Como compañía fundada con una base tecnológica, nunca dejamos de innovar y de buscar mejores formas de hacer las cosas. Nuestro objetivo sería convertir Azimo en un verbo, de modo que la gente sustituya el “Tengo que enviar dinero” (“I need to send some money”) por “Tengo que Azimo dinero” (“I need to Azimo some money”).
Además, tenemos grandes novedades a la vuelta de la esquina que anunciaremos antes de que acabe el año, pero todavía no podemos decir nada. Basta con decir que harán las cosas mucho más fáciles tanto para los que envían como los que reciben dinero. ¡Pero eso es todo lo que puedo decir!
MuyPymes: ¿Cuántas personas forman el equipo de Azimo?
Marta Krupinska: Somos alrededor de 90 personas trabajando en dos oficinas, en Londres y en Cracovia.
MuyPymes: ¿Procedéis todos del sector de internet y las nuevas tecnologías, de ámbitos más financieros? ¿Con qué experiencia y bagaje profesional afrontáis Azimo?
Marta Krupinska: Nuestros empleados son, sin duda, nuestro mayor valor. Contamos con gente con una variada serie de competencias en el sector y su experiencia se divide entre el sector tecnológico y el de los servicios financieros. Esto significa que comprenden totalmente la manera en la que nosotros queremos entrar en el sector financiero a través de la tecnología.
También es interesante mencionar que el 77% de nuestros empleados son migrantes, por lo que han experimentado ellos mismos la parte negativa de los envíos de dinero, y esa experiencia tiene un valor incalculable. Cuando has estado en esa situación, donde el dinero que tanto tiempo te cuesta ganar se va rápido con injustas tasas de transferencia, algo te impulsa a hacer un cambio.
