Quedan pocos calificativos que emplear a la hora de dar una nueva noticia sobre la tasa se paro en nuestro país. El último dato lo aporta la EPA (Encuesta de Población Activa) del tercer trimestre. El dato es escalofriante. Ya hay 5,77 millones de parados, una cifra que representa un 25,02% de la población que está en edad de trabajar.
En el último trimestre el paro subió en 85.000 personas, destruyéndose 96.90o empleos entre julio y septiembre. La tasa de paro alcanza así su nivel más alto de la serie histórica comparable, que arranca en 2001. Remontándose más atrás, utilizando series no comparables, los datos sólo abarcan hasta 1976. En ningún trimestre desde entonces se ha registrado una tasa de desempleo tan elevada como la actual.
De los casi 97.000 empleos destruidos entre julio y septiembre, 49.400 pertenecían al sector público y 47.600 al privado, reflejándose de este modo el recorte de personal que están haciendo las administraciones públicas para rebajar costes y reducir el déficit.
La única buena noticia es que el comportamiento del empleo en este tercer trimestre de 2012 es ligeramente mejor al del año 2011, a pesar de la subida del paro y del volumen de empleo destruido. Entre julio y septiembre del año pasado se perdieron 146.800 empleos (ahora se han destruido 96.900) y el número de parados aumentó en 144.700 (ahora ha aumentado en 85.000).