No es que los números le vayan mal a Google -de hecho ha rebasado las expectativas de Wall Street en los últimos cinco trimestres consecutivos- pero parece que los inversores necesitan datos más contundentes para apoyar al gigante de las búsquedas a largo plazo.
Pero la firma necesita mejorar su situación en el ámbito de las redes sociales y de la publicidad local, dos áreas que amenazan con desviar el tráfico en Internet. La mayor compañía de Internet del mundo está intentando que sus productos on-line continúen siendo populares a medida que los usuarios se inclinan por nuevos servicios como Facebook – actualmente la web con más tráfico – y los dispositivos inalámbricos.
Google, que ha lanzado recientemente una oleada de nuevos servicios – como una tienda de libros electrónicos que compite con Amazon y Bames & Noble y una página web de televisión on-line -, ha tenido además un buen comienzo con su sistema operativo para móviles, Android, utilizado en más teléfonos que el software de Apple.
Pero la cuestión es si el éxito de Facebook podría empezar a afectar a los negocios de Google, mientras que los inversores debaten si los comerciantes deberían anunciarse en ambos servicios online o cambiar su publicidad en Google a la red social más grande del mundo.