Vuelta a la rutina: evita la depresión

Poco a poco se van acabando los días de sol y playa y hay que volver a llevar a los niños al colegio y madrugar para trabajar. De hecho, la Dirección General de Tráfico espera más de seis millones de desplazamiento durante este último fin de semana de agosto. 

La vuelta al día a día no sienta bien a casi nadie. Sin embargo, algunos incluso caen en la denominada depresión postvacacional. Desde MuyPymes te damos algunos consejos para que los primeros días de trabajo no se hagan díficiles.

Tras acabar las vacaciones de verano, pocos son los que acuden felices el primer día de trabajo. Los días de descanso pasan factura y durante la primera semana es necesaria la adaptación de nuevo a la rutina. Sin embargo, a veces muchos trabajadores son incapaces de adaptarse y caen en el conocido como Síndrome postvacacional.

Depresión, irritabilidad, astenia, tristeza, apatía, ansiedad, insomnio, dolores musculares, tensión, nauseas, extrasístoles (palpitaciones), taquicardias, sensación de ahogo y problemas de estómago, entre otros son los síntomas que produce este síndrome que afecta a un 35% de los trabajadores entre 25 y 40 años, según los expertos. Si estos síntomas continúan después de 10 días de trabajo podremos hablar de la depresión postvacacional, en caso contrario estaremos ante un comportamiento normal entre los empleados.

Para evitar en la medida de lo posible sumergirnos en este síndrome, daremos algunos consejos a seguir que pueden ser extrapolables para cualquier empleado que vuelve de unos días de descanso.

– Dividir el tiempo de vacaciones en pequeños período hace más fácil la vuelta a la rutina.

– Regresar de nuestro lugar de descanso tres o cuatro días antes para adaptarnos poco a poco al ritmo de todo el año.

– Una vez en el trabajo, comenzar de forma gradual.

– Volver al trabajo un día que no coincida con el inicio de la semana también es recomendable para acostumbrar al cuerpo.

– Tener una actitud positiva frente al trabajo. Pensar en lo descansandos que estamos y volver a retomar con fuerzas los proyectos que habíamos dejado.

– Tomarse con la mayor «filosofía» posible la vuelta al trabajo.