Sabemos lo importante que es un buen sueldo en un trabajo, pero para nada es el único factor que importan. De hecho, seis de cada diez trabajadores preferirían tener un buen salario emocional frente a una subida económica de sueldo. Pero ¿Qué significa salario emocional? ¿Por qué es tan importante y cómo lo podemos ofrecer?
El salario emocional es la retribución no financiera que un empleado recibe en el ámbito laboral. Aquí entran muchos aspectos como el ambiente laboral, el modelo de trabajo, los incentivos tangibles o incluso, las iniciativas de responsabilidad social.
Y es que a diferencia del salario económico, que se traduce en ingresos monetarios, el salario emocional se compone de elementos intangibles que impactan directamente en el bienestar del trabajador.
Los beneficios del salario emocional son muchos. Desde el aumento de motivación que redunda en el rendimiento y productividad de los empleados hasta el conseguir un sentimiento de unidad y aumentar la reputación de la compañía, ya que cuenta con un equipo que expande el negocio en su vida personal o familiar.
Estas ventajas para los empleados redundan en la propia compañía. Una organización que contará con una mejor imagen de marca, reducirá el absentismo, fidelizará y mejorará la captación de talento y promoverá la participación y creatividad. Aspectos todos ellos esenciales para un negocio sano y de futuro.
Por ello, cada vez vemos a más empresas que desde los recursos humanos motivan el salario emocional como una parte fundamental de su estrategia.
Dentro del salario emocional se pueden establecer diferentes ámbitos de actuación o iniciativas:
- Desarrollo profesional: El acceso a oportunidades de formación continua y programas de capacitación es una forma de salario emocional.
- Reconocimiento y valoración: El reconocimiento, ya sea de manera informal o formal, contribuye a que el profesional se sienta valorado y apreciado, lo que contribuye a fortalecer su autoestima y motivación.
- Flexibilidad laboral: Los horarios flexibles, las opciones de teletrabajo y las políticas de conciliación ofrecen a los empleados la oportunidad de equilibrar sus responsabilidades profesionales y personales.
- Ambiente de trabajo: Los trabajadores valoran un ambiente laboral sano y enriquecedor que promueva la diversidad, la inclusión y la colaboración.
- Beneficios sociales: seguro de salud, ayudas al transporte o guardería, contribuyen significativamente al bienestar emocional de los empleados.
- Periodos de vacaciones flexibles: En periodos como la Navidad, ofrecer al trabajador la oportunidad de escoger sus días de vacaciones es una medida de conciliación muy apreciada por los trabajadores.
- Días libres en fechas señaladas: Hay empresas que no solo son flexibles con las vacaciones, sino, que conceden una serie de días libres, como el cumpleaños del trabajador o si necesita acudir a una consulta médica o cuidar de un familiar en un momento puntual. Esto reforzará su compromiso y satisfacción con la empresa.
- Participación en decisiones: Permitir la participación de los empleados en la toma de decisiones, y valorar sus opiniones y sugerencias, aumenta el compromiso del profesional con respecto a la empresa.
- Elementos de ocio y desconexión: Muchas empresas instalan zonas de ocio, descanso o desconexión en las oficinas como sofás para la lectura, futbolines, mesas de ping pong o de billar que sirven para olvidar un rato el trabajo, despejarse e incluso, estrechar lazos entre compañeros, algo que les hará trabajar mejor en equipo y ser más productivos.
- Propósito social: El hecho de que la empresa participe de manera activa en iniciativas de responsabilidad social empresarial contribuye a fortalecer el sentido de pertenencia a la compañía.
Entre las iniciativas que destacan para conseguir un buen salario emocional está el trabajo híbrido. En un contexto donde los empleados demandan más conciliación y herramientas de trabajo flexibles conseguir un clima híbrido es vital. Tanto que, como veíamos en nuestra encuesta, el 49% de los trabajadores se plantearía cambiar de trabajo, si cambia su modelo laboral actual. Un entorno que el 44% establece como híbrido y donde el ratio de satisfacción está por encima de los 70 puntos sobre 100. En el caso del teletrabajo ese índice alcanza casi los 100 puntos.
Un camino por andar
Pese a las bonitas palabras en torno al salario emocional, este no se consigue de un día para otro. Es un camino de largo recorrido, donde la compañía debe trabajar en diferentes ámbitos para conseguirlo.
Además de involucrar a todo el equipo, es necesario dotar a la plantilla de herramientas que permitan que este salario emocional sea una realidad. Aquí hablamos de tecnología que capacite el trabajo híbrido en cualquier circunstancia, de aplicaciones para estar conectados con los diferentes equipos o con tiempo para fomentar ese buen clima laboral que tanto beneficio dará a medio y largo plazo.