La compañía surcoreana ha presentado el LG 32BQ85U-W, un nuevo monitor profesional que se encuadra dentro de su categoría UltraFine y que cuenta con un abanico de prestaciones realmente interesante. A nivel de diseño nos encontramos con una línea clásica y una base de apoyo con una terminación curvada y terminada en color plateado, que contrasta con el frontal en color negro del marco de la pantalla.
En la parte trasera del LG 32BQ85U-W tenemos una terminación en color blanco y un punto de agarre que nos permite regular el monitor en inclinación, y también en giro, orientación y altura. Esto se traduce en una excelente ergonomía, como habréis podido imaginar. No solo podremos ajustar el monitor a cada perfil de usuario, sino que también podremos adaptarlo a nuestras necesidades en todo momento.
El LG 32BQ85U-W tiene un panel IPS de 31,5 pulgadas con resolución de 3.840 x 2.160 píxeles, lo que nos deja una relación de píxeles por pulgada muy buena. Presenta un acabado mate anti brillos, tiene una tasa de refresco de 60 Hz, un contraste estático de 2.000:1, un brillo de 400cd/m2 y ofrece unos ángulos de visión de 178 grados. Su profundidad de color es de 10 bits, pero en modo 8 bits + FRC.
La pantalla cuenta con la tecnología Adaptive Sync, es compatible con AMD FreeSync y con NVIDIA G-Sync, reproduce el 98% el espacio de color DCI-P3 y tiene la certificación VESA DisplayHDR 400. El tiempo de respuesta de gris a gris es de 5 ms, y cuenta con la función «DAS» («Dynamic Action Sync»), que reduce el input lag (retraso en la entrada).
Cuenta también con dos altavoces de 5 vatios cada uno, lo que significa que no tendremos que conectarle unos para empezar a utilizarlo, y viene con un conector USB Type-C compatible con DisplayPort y alimentación (hasta 90 vatios), un DisplayPort 1.4, dos salidas HDMI 2.0, tres puertos USB 3.0, un conector USB Type-B y un jack de 3,5 mm para auriculares. Su precio es de 699 dólares, cifra que en España debería convertirse en unos 799 euros al convertir divisa y aplicar impuestos.