El síndrome del trabajador quemado, o ‘burnout’, es una enfermedad que se manifiesta en algunos trabajadores, causada principalmente por el agotamiento físico y mental provocando una cronificación del estrés laboral. Tal es la magnitud que ha cobrado esta enfermedad que en enero de 2022 la OMS (Organización Mundial de la Salud) lo reconoció como enfermedad profesional y cada vez son más los trabajadores que la sufren.
Sus causas pueden ser diversas y, de hecho, según se establece en la guía “El salario emocional: Cómo reforzar tu propuesta retributiva” elaborada por Sodexo Beneficios e Incentivos, una de las claves para evitar este problema es su reconocimiento, ya que valorar, motivar y destacar el trabajo que realizan los empleados, permite a las empresas mantener el equipo unido y comprometido.
En este sentido, el papel de los líderes en las compañías juega un papel importante en el bienestar de los trabajadores. Lejos ha quedado el estilo de liderazgo autoritario sino que actualmente la tendencia más extendida se conoce como ‘liderazgo sensible’. Los líderes sensibles son aquellos que tienen en cuenta los sentimientos de sus compañeros, se ponen en su lugar para conocer su punto de vista y tomar así mejores decisiones. Son personas con ideales muy claros que tienen en cuenta los objetivos de la empresa, pero también están comprometidos con el bienestar emocional de su equipo, y por ello defienden
sus derechos hasta promover su bienestar psicológico. Desde Sodexo Beneficios e Incentivos destacan cuatro claves para aplicar este tipo de liderazgo en las empresas:
- Aplicar una escucha activa: la única forma de saber cómo se sienten los empleados y detectar áreas de mejora es hablando con ellos, interesándose por su estado y pidiendo su feedback sobre áreas de mejora. La escucha activa es una excelente forma de crear un diálogo con los empleados y lograr que se sientan comprendidos. Además, es la mejor herramienta para detectar áreas de mejora que permitan aumentar su compromiso con la empresa. Los responsables y directivos deben aplicar la escucha activa como parte del liderazgo sensible, ya que son el punto de contacto más cercano y directo con el empleado, permitiendo trabajar tanto los aspectos profesionales como los personales.
- Habilidades comunicativas: La empatía y la asertividad son soft skills fundamentales en un líder para que la comunicación fluya de forma natural de forma vertical y horizontal, tanto con los equipos como con otros líderes. La importancia de las habilidades comunicativas es tal para las empresas, que ha adquirido la categorización de power skills, que, dicho de otro modo, son las habilidades que hacen único a un empleado y lo capacitan para abordar determinadas responsabilidades de forma óptima, convirtiéndolo en una pieza importante dentro de la empresa.
- Crear entornos de trabajo inclusivos, respetuosos y felices: ante los cambios culturales y sociales, las empresas han debido adaptarse y fomentar las políticas inclusivas como seña de la cultura empresarial, que deben fomentarse también a través de los propios líderes. Priorizar la diversidad y la inclusión, además del respeto, es indispensable para mejorar el bienestar de toda la empresa y crear entornos felices, además, es una palanca de captación y retención del talento.
- Trabajar el liderazgo mediante la formación: Ejercer un liderazgo sensible puede ser una cualidad innata de muchos profesionales, pero, además, es posible y recomendable formar a los propios empleados para aprender a gestionar mejor un equipo a través de procesos de upskilling. Por este motivo, muchas empresas ofrecen opciones formativas a través de cheques de formación -como los de Sodexo- con el objetivo de potenciar las habilidades de sus empleados y aumentar su compromiso de forma simultánea. Además, es un servicio totalmente exento de IRPF, por lo que el empleado puede ahorrar al menos un 25% del importe del curso si se gestiona a través de retribución flexible.
“En línea con la priorización del bienestar emocional en los equipos, son cada vez más las compañías que apuestan por incrementar el foco en valores intangibles, como el estilo de liderazgo, para la mejora del compromiso de los empleados potenciando estrategias de salario emocional”, ha explicado Miriam Martín, directora de Marketing y Comunicación de
Sodexo.