El año pasado Microsoft anunció que Internet Explorer 11 tenía los días contados, y que iba dejar de darle soporte cuando se produjera el lanzamiento de una importante actualización para Microsoft Edge. Dicha actualización, que marcaría el final de este navegador, estaba prevista para el 14 de febrero de 2023, es decir, justo para hoy mismo.
La verdad es que ese plan no fue el primero que tuvo Microsoft en la cabeza. Inicialmente, la compañía de Redmond estuvo considerando dejar de dar soporte a Internet Explorer 11 mediante una actualización para Windows 10, pero al final optó por cambiar de planes y decidió que hacerlo con una actualización de Microsoft Edge era más simple, y que podría ayudar a los consumidores en su transición.
Desde entonces, la compañía recordó en numerosas ocasiones a los usuarios de Internet Explorer 11 que debían preparar su transición a Microsoft Edge, y que el primero quedaría sin soporte a partir del 14 de febrero de 2023. Hoy es el día, y la actualización que marca el final de dicho navegador ya está empezando a llegar a todos los usuarios, puesto que está siendo objeto de un despliegue general.
Una vez que se produzca la instalación de esa actualización ya no será posible volver a la versión anterior. Si ejecutamos Internet Explorer 11 recibiremos un aviso donde se puede leer que «el futuro de Internet Explorer es Microsoft Edge», y seremos redirigidos a Edge de forma automática. En este sentido, Microsoft ha sido muy clara:
«Si su organización aún depende de IE11, debe tomar medidas ahora para completar su transición antes del 14 de febrero de 2023 o arriesgarse a una interrupción del negocio a gran escala cuando los usuarios pierdan el acceso a las aplicaciones dependientes de IE11″.
La transición a Microsoft Edge no es para nada complicada, de hecho el gigante de Redmond se preparó para ella hace tiempo e incluso lanzó en una actualización el IE Mode, que tenía como objetivo facilitar la transición a Edge y mover todos los datos del anterior navegador a este.
