Ansasol está de enhorabuena. La empresa de ingeniería y desarrollo de proyectos e instalaciones de energía solar y plantas fotovoltaicas ha sido reconocida con el Premio Pyme del Año de Málaga 2022, dentro de la categoría pyme sostenible.
Este reconocimiento, otorgado por la Cámara de Comercio de España, la Cámara de Comercio de Málaga y Banco Santander, reconoce el desempeño de las pequeñas y medianas empresas de la provincia de Málaga, cuya actividad es fundamental para la creación de empleo y riqueza a nivel local.
En palabras de Tobias Greiling, CEO y cofundador de Ansasol, “este reconocimiento es una respuesta más a nuestro compromiso con el desarrollo sostenible y a nuestra visión como empresa enfocada a realizar proyectos de energía limpia y renovable en cualquier parte del mundo, mediante procesos productivos eficientes, rentables y sostenibles”.
La empresa ganadora del Premio Pyme del año 2022 en Málaga concurrirá al Premio Nacional Pyme del Año 2022 que se fallará en el primer trimestre de 2023. Asimismo, las empresas ganadoras de los diferentes accésit y la Mención Especial concurrirán al Premio Nacional en sus respectivas categorías.
Proyectos sostenibles
Ansasol, mediante su nueva unidad de negocio especializada en hidrógeno verde, dispone actualmente de más de 20 proyectos de hidrógeno verde entre fases de tramitación o en desarrollo, distribuidos entre 5 comunidades autónomas del territorio español.
Ya están en desarrollo interno más de 200 MW y en tramitación medioambiental y de industria otros 750 MW, por lo que la cartera actual asciende a una potencia total de electrolización de 950MW, convirtiéndolo en uno de los planes de desarrollo de hidrógeno verde más ambiciosos de todo el sector privado español para los próximos años.
Este vector energético cada vez ocupa un espacio más protagonista en la conversación alrededor de la transición energética y en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas. Esto es debido a que el hidrógeno, el elemento químico más abundante del universo, puede actuar como un nuevo combustible para vehículos con cero impactos contaminantes. También puede ser un portador de energía, introducido y transportado por la red de gaseoductos europeos y convertido de nuevo en electricidad, además de que su almacenamiento energético es viable.