La movilidad sostenible es un concepto muy actual que engloba a muchos tipos de vehículos y servicios. Sin duda, para las grandes distancias, el más adecuado para trasladarse sin problemas y cuidando del medio ambiente, es el coche eléctrico. Como el resto, puede sufrir problemas o averías, como la rotura de lunas. En cualquier caso, esto no debe arruinarte las vacaciones, solo has de pedir cita en Carglass y te lo solucionarán en cuestión de horas.
El respeto por el medio ambiente, desde todos los ámbitos, ha propiciado la redacción de una Ley de Mobilidad Sostenible, cuyo texto se espera sea aprobado por el Consejo de Ministros, a finales de 2022. Los cuatro pilares en los que se sostendrá esta normativa serán: la movilidad como un derecho social, limpia y saludable, un sistema de transporte digital e innovador y una mejor inversión al servicio de los ciudadanos.
La apuesta por la movilidad sostenible de los coches eléctricos
La movilidad no solo es una necesidad pública, sino que tiene un carácter transversal y está regida por multitud de administraciones. Para lograr que esta sea sostenible es necesario establecer un principio de colaboración, cooperación y coordinación entre todas ellas. En ello están trabajando los diferentes organismos, pero ¿qué podemos esperar de la movilidad sostenible en un futuro cercano?
- Cambio paulatino hacia el coche eléctrico. En algunas ciudades españolas, como Madrid, ya se están poniendo trabas a los coches más viejos y contaminantes. La idea es que la población vaya sustituyendo su vehículo por otros eléctricos, más sostenibles, más silenciosos y mucho más seguros, con la incorporación de las últimas tecnologías. Al no necesitar combustibles fósiles, estos vehículos son una opción cada vez más apreciada por la gente.
- Transporte compartido. Actualmente, plataformas como Blablacar o car2go y muchas otras están fomentando que la población use, cada vez más, el transporte compartido. Económicamente sale más barato pagar solo cuando lo uses, y además, contaminas menos. Los jóvenes cada vez tienen más claro que no quieren un coche en propiedad, pero tampoco renunciar al movimiento y la libertad que este le ofrece. ¿La solución? Viajes compartidos.
- Vehículos sostenibles. En nuestras ciudades cada vez vemos más bicicletas, patinetes y otras maneras de desplazarse que no implica un vehículo a motor.
- Uso masivo del IoT. El internet de las cosas incluye todos esos dispositivos que «hablan» entre sí y se comunican a través de la red y los datos. A nivel vial, las señales, vehículos y semáforos son capaces de establecer una comunicación real, sobre todo tras el despliegue masivo del 5G. En un futuro cercano, tu vehículo se podrá conectar con otros, avisarte de dónde hay una plaza de parking libre, si hay peligros en la calzada…. Mientras tanto, los semáforos se autoregularán, en función de la cantidad de tráfico, presencia de peatones, etc…
Según indican en el informe de McKinskey Center for Future Mobility, la movilidad del futuro no dependerá de un solo elemento, sino que habrá de adoptarse un enfoque integrado. Tanto las ciudades, como los peatones y conductores necesitarán acostumbrarse y ver los beneficios de este sistema. Los objetivos son varios, desde reducir los vehículos más contaminantes, hasta facilitar la vida a la gente.
Así, aparecerán nuevos conceptos, algunos de los cuáles ya se están integrando rápidamente en el mercado. Por ejemplo, el de última milla, que hace referencia al último tramo de entrega de mercancías, es decir, cuando se da al cliente. También aparecen los de ride sharing, ride pooling y ride hailing. Son conceptos para designar a los profesionales o usuarios que usan coche compartido.
Por último, no hay que olvidar los nuevos servicios de charging, que nacen al calor de la movilidad eléctrica y que facilita la vida a los conductores de coches híbridos enchufables. Estas plataformas informan sobre dónde están los puntos de recarga, facilitan el pago, etc.
En definitiva, la movilidad en ciudades y carreteras hace tiempo que se propuso ser más sostenible. La apuesta por el vehículo eléctrico y los servicios de transporte compartidos van a pisar muy fuerte en los próximos meses.