El fuerte incremento de los precios está impactando en el mercado inmobiliario potenciado la compra de vivienda de segunda mano.
El encarecimiento de las materias primas y otros productos del sector de la construcción como consecuencia de la escasez de suministro que existe a nivel global y de los problemas logísticos, está incrementando notablemente el precio de la vivienda nueva.
Junto a esto, la incertidumbre económica está llevando a una inflación que vemos en prácticamente todos los sectores, especialmente en el inmobiliario. Una tendencia que se está viendo reflejada en un creciente interés de los inversores, tanto de grandes como particulares, en las viviendas como “valor refugio”.
De acuerdo con los datos que maneja la ‘proptech’ Casavo de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, esta situación ha llevado a que la demanda de vivienda de segunda mano haya supuesto el 79,5% de las transmitidas por compraventa solo durante el pasado mes de septiembre. Una cifra muy superior a lo habitual y muy por encima de la vivienda de obra nueva, que supuso el 20,5%.
A estos porcentajes ha contribuido, en gran medida, el fuerte encarecimiento de la vivienda nueva, aunque también lo ha hecho durante el último año la de segunda mano. De acuerdo con los datos de Eurostat, el precio de la vivienda experimentó un incremento del 6,8% en el segundo trimestre del año, tanto la nueva como la de segunda mano.
Este aumento de precio, unido a las características coyunturales como consecuencia del impacto de la pandemia, que está provocando una gran incertidumbre en los mercados, está llevando a una alta tasa de inflación a niveles del año 2006.
No obstante, las previsiones que maneja la Confederación Nacional de la Construcción (CNC), esta inflación será menos acusada en el mercado de segunda mano que en el de obra nueva, lo que la convierte en la mejor opción para invertir en “valor refugio”.
La vivienda de segunda mano, un valor en alza
Ante el notable crecimiento que ha experimentado la compra de vivienda en los últimos meses, un 40,6% solo durante el mes de septiembre, y de las de segunda mano en particular, desde Casavo prevén que esta tendencia siga al alza de cara a los próximos meses.
Si bien, como apunta Francisco Sierra, Director General de Casavo en España, el aumento que ha experimentado la compra de vivienda de segunda mano hace prever una evolución positiva de este segmento inmobiliario, “debemos tener en cuenta que la incertidumbre ante la escasez de suministros y la futura Ley de Vivienda provocará un ligero incremento de la oferta de la vivienda de segunda mano frente a la posible retracción de la obra nueva”.
Si bien la opción de compra de vivienda de segunda mano se ha convertido en la opción preferente por los inversores, especialmente particulares ya que además de ser un “valor refugio” pueden disfrutar de ella, hay que tener en cuenta que también tiene sus “contras”. En muchos casos, estas viviendas necesitan de una reforma cuyo coste puede ser difícil de asumir ya que no entra en la hipoteca solicitada para asumir el coste de la vivienda.
En este sentido, también hay que tener en cuenta que con estas reformas también se pueden encontrar el problema de la falta de materiales de construcción para llevarla a cabo, así como un encarecimiento de los mismos.
No obstante, desde Casavo apuntan que esta situación puede representar también una oportunidad para ofrecer viviendas de segunda mano, reformadas y con garantías. Para ello han desarrollado una plataforma tecnológica que realiza valoraciones de viviendas y ofertas instantánea que permite realizar la compra directa de inmuebles en menos de 7 días.
A través de ella, la compañía estudiará las posibilidades que tiene una vivienda para adaptarla a las necesidades actuales y ponerla de nuevo a la venta en el menor tiempo posible y a precios competitivos.
Imagen inicial | Tierra Mallorca