Nuestros compañeros de MuyComputer han compartido una interesante guía en la que nos cuentan cómo podemos dar una segunda vida a un portátil con Linux. Dicha guía parte del concepto de portátil antiguo y se centra, principalmente, en los problemas que ese tipo de equipos pueden tener al intentar mover un sistema operativo como Windows 10.
Por poner un ejemplo a nivel de hardware que nos sirva como referencia para esta guía, tenemos los equipos basados en los veteranos Intel Core 2 Duo, y también en los AMD Athlon X2 equivalentes. Un portátil con Linux basado en una configuración de ese tipo, y acompañado de 1 o 2 gigabytes de memoria RAM, ofrecerá un rendimiento muy bueno con las cinco distros que recomiendan nuestros compañeros.
Para dar forma a ese portátil con Linux, debemos seguir un proceso de instalación «agresivo» que nos hará perder todos los datos que tengamos instalados, aunque esto no será un problema si hacemos una copia de seguridad. Tenemos muchas opciones, desde la nube hasta unidades externas.
Las distros que recomiendan nuestros compañeros para tener nuestro portátil con Linux, y dar una segunda vida a ese equipo antiguo que teníamos por casa, son: MX Linux, que es una distro muy ligera y fácil de utilizar, Debian MATE, que ofrece un valor sólido aunque resulta un poco más complicada de instalar y de configurar, Puppy Linux, que es muy ligera y viene con herramientas muy interesantes, openSUSE Leap con XFCE, que también ofrece muchas posibilidades, y AntiX, que puede funcionar con tan solo 256 MB de RAM.
Un portátil con Linux que tenga una configuración de hardware modesta nos puede servir como segundo equipo, puede ayudarnos a sacar adelante ciertas tareas menos exigentes. También puede servirnos para aprender más sobre entornos Linux sin tener que comprometer la integridad de nuestro equipo principal.