Según el estudio Audible Compass 2021, en Europa, el 45% de los encuestados ha escuchado audiolibros, podcasts y podcasts en los últimos doce meses y España lidera esta clasificación con un 55% de oyentes.
Europa crece unida también en términos de hábitos de escucha de audio-entretenimiento. La media de aficionados al audio en los cinco países más grandes de la Unión es del 45%. España está a la cabeza del ranking con un amplio margen, un 55% de los españoles consumen audio, seguida de Italia con un 46%, el Reino Unido con un 45% y Alemania con un 42%. En Francia, en cambio, tan solo el 37% de la población han descubierto el placer de consumir contenidos en formato audio.
Este estudio ha demostrado que una vez que descubrimos y nos sumergimos en el apasionante mundo de las historias contadas, el audio-entretenimiento y la información en formato audio, nos hacemos fieles consumidores: Por término medio, casi el 40% de los encuestados escucha audiolibros y podcasts al menos una vez al mes. España de nuevo se mantiene líder con un 48% de oyentes habituales. Por detrás, Italia con un 41%, el Reino Unido, con un 38%, y Alemania, con un 36%. Francia cuenta de nuevo con el porcentaje inferior, un 33% de los franceses consumen audio al menos una vez al mes.
Preferencia por los dispositivos móviles
Aunque el momento de consumo favorito por la mayoría de los encuestados en todos los países (66%) se produce cuando estamos en casa; la movilidad, el transporte y la digitalización siguen ocupando un lugar muy destacado en la lista de preferencias de momentos y hábitos de consumo. Con una media del 74%, tres cuartas partes de los encuestados en Europa reproducen contenidos de audio a través de su smartphone o tableta. En concreto, en España la cifra es del 81%, en Italia del 79%, seguida de Alemania con el 74%, Francia con el 70% y el Reino Unido con el 67%.
Además, los altavoces inteligentes son actualmente el dispositivo preferido por una cuarta parte de los encuestados: Italia y el Reino Unido comparten el primer puesto con un 28%, seguidos de Alemania con un 25%, Francia con un 23% y España con un 22%.
Al igual que en los cinco países encuestados, el momento de consumo más común para los oyentes en España es «para relajarse en casa»; el 53% disfruta de sus audiolibros o podcasts de esa manera y el 31% consume audio antes de ir a dormir. En este sentido, el 32% de los españoles prefieren escuchar mientras hacen las tareas del hogar frente a una media europea del 26%. El 16% eligen los tiempos de espera en el supermercado, médico o parada del autobús para escuchar un audiolibro o podcast con la voz de su artista favorito y la media europea es del 15%. Comparando los resultados de los cinco países europeos, se ha recogido que el 20% de los españoles frente al 13% de los comunitarios, escuchan audiolibros y podcasts mientras hacen deporte.
Además, 26% frente al 20% de la media europea prefieren escuchar cuando salen a caminar o a dar un paseo. Sin embargo, somos junto a los italianos, los menos propensos a consumir este tipo de contenidos en el coche, tan solo el 18% de los españoles eligen esta situación mientras que el 24% de los europeos sí ven en el coche el mejor momento para consumir audio-entretenimiento.
Otros de los datos más significativos extraídos de Audible Compass es que a los oyentes españoles les gustan los contenidos de audio originales: El 78% de los encuestados cree que es muy positivo que los grandes autores de bestsellers se animen a escribir audiolibros e historias que únicamente puedan ser escuchadas, como el Audible Original ‘Jodidísmas’, la ficción sonora escrita exclusivamente para el servicio por la reconocida escritora María Dueñas o la versión dramatizada de ‘El lejano país de los estanques’ del escritor Lorenzo Silva.
Los españoles también valoran muy positivamente que los audiolibros y los podcasts les permitan realizar otras tareas y no sentirte atados u obligados a pasar más tiempo frente a una pantalla: el 65% confiesan permanecer demasiado tiempo frente a su smartphone, PC o televisión y, por lo tanto, ven una vía de escape el consumo de contenidos en audio, fenómeno que en otros países de habla inglesa ya se conoce como «fatiga de pantallas» («screen fatigue»).
