España ya está en los volúmenes de impresión en los que se encontraba antes de la irrupción de la pandemia. Una buena noticia que refleja un gran esfuerzo en la recuperación, ya que nuestro país experimentó una de las caídas más grandes de toda Europa, con un descenso del 80% frente al 60% de la media continental.
Además, según un estudio de Toshiba, España registra actualmente un volumen de impresión ligeramente superior al de la media de Europa, donde también se consolida la tendencia de recuperación a los niveles previos a la pandemia, de forma generalizada.
Toshiba ha realizado su análisis a partir de los datos suministrados por más de 3.200 clientes en Europa, de los que el 39% son empresas de más de 100 trabajadores que utilizan sistemas de impresión y gestión documental de manera habitual para el desarrollo de su negocio.
Toshiba, que también ha analizado el impacto de la pandemia en el uso de las funciones de sus equipos multifuncionales, señala que la de escaneado/digitalización ha duplicado su uso en Europa respecto a 2019, cuando ya era la más utilizada, por delante de la impresión y la copia, por este orden.
En el caso de nuestro país, el uso de la función de escaneado es ligeramente inferior a la media, aunque con grandes expectativas de crecimiento en los próximos doce meses, según las previsiones de Toshiba.
Previsión de seguir creciendo en 2022
En esta misma línea, Toshiba estima que los volúmenes de impresión seguirán creciendo en 2022, así como la digitalización de documentos y el acceso a documentación digitalizada. En concreto, la compañía señala como causa principal de este crecimiento al aumento de los procesos de digitalización de las empresas, incluida la implementación de los servicios cloud, tanto para impresión desde cualquier dispositivo a través de internet como para acceder a documentación alojada en la nube y debido a los procesos de digitalización de las empresas.
Por último y en lo que se refiere al parque instalado de equipos multifunción, del análisis de Toshiba se desprende que éste ha permanecido plano al predominar el mercado de sustitución durante la crisis sanitaria.