Las habilidades digitales y las soft skills son actualmente los factores más demandados por las empresas en los profesionales.
Por este motivo, es clave que los colectivos más vulnerables para encontrar empleo, como los jóvenes y los seniors, refuercen sus perfiles y obtengan capacidades alineadas con la predisposición al cambio, el pensamiento crítico, la creatividad, el liderazgo y el trabajo en equipo o la inteligencia emocional.
Esto, sin duda, impactará positivamente en las tasas de desempleo. Y es que la llegada de la pandemia ha provocado aumentos importantes en la tasa de paro en España debido a la situación de inestabilidad e incertidumbre económica generada por la misma.
Pérdidas en facturación, despidos o ERTEs han protagonizado la actividad de diversas empresas en este último año. Si nos centramos en colectivos, no cabe duda de que los jóvenes, menores de 25 años que buscan su primer empleo, y la población senior, mayores de 50 años que han sido despedidos y ahora se encuentran en búsqueda activa, han sido los más afectados.
Desempleo en menores de 25
Concretamente, la tasa de desempleo entre los menores de 25 años fue del 39,9% en España en enero de 2021, casi nueve puntos porcentuales por encima de la tasa registrada en el mismo mes del año anterior, y 23 puntos por encima de la media de los países de la Unión Europea (16.9%), según datos ofrecidos por Eurostat.
Por su parte, entre el grupo de profesionales senior, el desempleo también ha crecido en los últimos meses, teniendo en cuenta que, en el segundo trimestre del 2021, la tasa de
paro de los mayores de 55 fue de 12,75%, 1,2 puntos porcentuales por encima de la tasa registrada en el mismo período del año anterior, según datos del INE.
Y es que, si bien estos colectivos ya jugaban con desventaja en el mercado laboral por su escasa experiencia, en el caso de los jóvenes, o la necesidad de actualización de conocimientos, en el caso de los mayores, la situación ahora se presenta aún más difícil.
«Los profesionales junior y senior son activos importantísimos para cualquier empresa. Por un lado, los jóvenes aportan dinamismo, frescura, nuevas ideas y conocimiento vanguardistas, mientras que el público senior, aporta gran experiencia y capacidad de transmitir sus conocimientos a las siguientes generaciones, además de otros dotes como el pensamiento crítico o la capacidad de toma de decisiones».
«Por ello, para que estos profesionales sean relevantes en el nuevo entorno laboral es necesario que, por un lado, las empresas realicen una gestión de talento correcto, y por otro, que los propios profesionales se formen con las habilidades más demandadas por el mercado, que actualmente se enmarcan en el ámbito digital, para cumplir con las demandas laborales que existen en la sociedad postpandemia y ser relevantes en este nuevo paradigma laboral», así lo explica Ana Delgado, Chief Education Officer en The Valley.