La firma Pine64, conocida por fabricar dispositivos Linux económicos, ha presentado PineNote E Ink, una tablet basada en tinta electrónica que ha generado un gran interés por su diseño, sus especificaciones y sus posibilidades de uso.
Como sabrán nuestros lectores habituales, las pantallas de tinta electrónica presentan ventajas importantes frente a las pantallas tradicionales, entre las que podemos destacar un menor consumo energético y una experiencia de uso cercana a la que obtendríamos al trabajar con papel. Esto hace que sean ideales para trabajar con textos y documentos extensos, y también para tomar notas, escribir, diseñar y crear contenidos «a mano».
La PineNote E Ink es una tablet que apuesta por el valor que ofrece la tinta electrónica, y lo hace a lo grande, ya que integra una pantalla de 10,1 pulgadas con resolución de 1.872 x 1.404 píxeles. Su corazón está formado por un SoC Rockchip RK3566, que integra una CPU de cuatro núcleos Cortex-A55 (64 bits), cuenta con 4 GB de memoria LPDDR4, más que suficiente para garantizar un alto nivel de fluidez, y dispone de 128 GB de capacidad de almacenamiento eMMC.
En la pantalla de la PineNote E Ink nos encontramos con una tasa de refresco de 60 Hz y 16 niveles de gris. Para poder utilizarla en entornos donde la iluminación ambiental sea escasa, o totalmente nula la PineNote E Ink dispone de una luz frontal de color ajustable, lo que nos permite adaptarla en función de la hora del día sin ningún tipo de problema.
El resto de sus especificaciones se completan con altavoces estéreo, dos micrófonos, Wi-Fi 5, un conector USB Type-C y compatibilidad con recarga rápida. Podemos escribir y dibujar directamente en la pantalla táctil utilizando un lápiz óptico, y utilizará una versión de Linux adaptada a sus particularidades como sistema operativo (podría partir de Plasma Mobile). No tenemos una fecha de lanzamiento exacta, pero sabemos que llegará antes de terminar este año, y que costará unos 399 dólares.