La inversión en publicidad digital se resintió durante el 2020 debido a la pandemia. Sin embargo, la inversión en redes sociales fue uno de los pocos segmentos que siguió creciendo. Según datos de IAB Spain, las empresas invirtieron un 3,5 % más en publicitarse en estas plataformas que en 2019, por encima de los 835 millones de euros.
En el mundo hay más de 1.000 millones de cuentas que utilizan Instagram todos los meses. Es una de las redes sociales del momento, tanto para usuarios como para empresas. De hecho, nueve de cada 10 personas que están en Instagram siguen a alguna marca, según datos de la propia plataforma. Además, ocho de cada 10 personas quieren conocer productos nuevos en Instagram, por lo que es un escaparate perfecto para hacer crecer un negocio.
Para crear un anuncio, solo hay que tener un perfil de empresa, diseñarlo y configurarlo desde Instagram Business. Los expertos de www.beedigital.es, la compañía líder en soluciones tecnológicas de digitalización para pymes y autónomos en España, explican los diferentes tipos de anuncios que permite actualmente Instagram y qué ofrece cada uno:
En los stories. Requieren formato vertical, ya que aparecen cuando el usuario está visualizando las historias de las cuentas a las que sigue.
Anuncios con foto. La publicación debe ser cuadrada o rectangular, pues aparece en el feed principal del usuario, cuando este se desplaza hacia abajo para ver las nuevas publicaciones.
Anuncios con vídeo. También se ven en el feed principal y exigen un formato cuadrado o rectangular. Solo pueden durar hasta 120 segundos.
Anuncios por secuencia. De nuevo, son publicaciones que aparecen en el feed del usuario. En este caso, se trata de una colección de varios vídeos o imágenes. Permite mostrar varios productos a la vez, contar una pequeña historia con distintas imágenes o enseñar un producto desde diferentes ángulos.
Anuncios de colección en la sección «explorar». La publicidad se muestra en la sección «explorar» de la aplicación, la que tiene un símbolo de una lupa.
No es recomendable usar el mismo anuncio en las historias y en el feed: la imagen o el vídeo podría cortarse y el mensaje podría leerse mal.
A la hora de crear una estrategia publicitaria, es importante hacer un estudio previo y fijar objetivos. Por eso, desde BeeDigital han recopilado algunos consejos para aprovechar al máximo la herramienta de Instagram Ads:
1. Determinar el público objetivo
¿Quién va a comprar mi producto?, ¿a quién le puede interesar?, ¿quién quiero que me vea? El público objetivo determinará el estilo, el mensaje e incluso si Instagram es la red social más apropiada o no.
2. Adaptarse a la audiencia de Instagram
Las personas que utilizan Instagram son mayoritariamente jóvenes de entre 18 y 29 años. Igualmente, seis de cada 10 viven en zonas urbanas o en las afueras de ciudades. Es importante conocer esta información antes de iniciar una campaña de publicidad: si el público objetivo no se corresponde con estas variables, quizá no sea la red social más apropiada para la empresa. No obstante, estas estadísticas están cambiando, ya que Instagram gana peso día a día entre el público más adulto; por su parte, los adolescentes están mirando más hacia TikTok.
3. Estudiar a la competencia
Instagram permite ver qué campañas activas tiene una cuenta de empresa. Solo hay que entrar en su perfil, pulsar en las opciones (en la esquina superior derecha, donde aparecen tres puntos) y en «información sobre esta cuenta». Esta información será muy útil para saber qué tipo de mensajes envía la competencia al público que nos interesa, qué lenguaje utilizan, si usan más imágenes o vídeos… Sin embargo, eso no implica que haya que copiar a la competencia, pero sí tener en cuenta sus estrategias. Por ejemplo, si la mayoría de las empresas del sector usan un estilo similar, quizá se pueda arriesgar con una publicidad diferente que destaque entre la multitud.
4. Fijar el objetivo
El mensaje o eslogan dependerá de qué queramos conseguir con él. Al entrar en el creador de anuncios de Instagram, elegir el objetivo de la campaña es el primer paso. Instagram divide los objetivos en tres grandes metas:
- Reconocimiento: si se quiere aumentar el reconocimiento de marca o su alcance.
- Consideración: si se busca aumentar el tráfico de las publicaciones, la interacción, la descarga de aplicaciones, llegar a más clientes potenciales…
- Conversión: si se quiere conseguir más tráfico en el negocio o ventas del catálogo.
5. Coherencia con la imagen y los valores de la marca
La publicidad debe ser coherente con la imagen que proyecta la empresa. No solo en cuanto a la estética (usar los colores corporativos y un estilo similar al que se use en las publicaciones habituales, por ejemplo), sino también en lo referente a los valores y a la cultura de la empresa.
Hay compañías que quieren destacar por su compromiso medioambiental, otras por su estilo artístico e innovador y algunas que ponen sus bajos precios en el centro de su estrategia. En cualquier caso, aquello que defina a la marca debe reflejarse también en la publicidad.
6. Medir los resultados
Se puede acceder a la información sobre los resultados de la campaña, datos muy valiosos para saber si ha funcionado o no. Puede ser difícil conseguir los resultados esperados a la primera, por eso es importante aprender constantemente.
Una forma de saber qué funciona mejor es con la prueba A/B, un test que compara los resultados de un mismo anuncio al hacerle pequeñas variaciones. Instagram te permite publicar dos versiones de una misma campaña y estudiar cuál ha funcionado mejor: un texto más breve o más extenso, incluyendo o no emojis, con vídeo o con imagen…