Después de un año difícil para la economía española, las estimaciones de los distintos organismos invitan a pensar en un futuro con cierto optimismo. Si atendemos a lo que dice la Comisión Europea, España va a liderar el crecimiento de la eurozona, tanto en 2021 como 2022, recuperando los niveles de PIB que teníamos antes de la pandemia. De acuerdo a estas previsiones, nuestro Producto Interior Bruto (PIB) crecerá casi un 6% este año y un 6,8% a partir del año que viene, lo que suponen los mejores datos del continente.
En este contexto de progresiva recuperación, la digitalización se ha tornado fundamental para muchas empresas, especialmente para las pymes. A muchas les ha permitido seguir manteniendo sus negocios a flote ante un consumidor cada vez más digital y que ha incrementado un 52% el uso del ecommerce desde el inicio de la pandemia, según datos de un estudio de GFK para Visa.
¿Cómo vamos a lograr esta recuperación?
Está claro que esta recuperación solo va a ser posible con la ayuda de todos: grandes empresas, pymes, administración, autónomos y consumidores. En este sentido, la activación del consumo y la digitalización de las plataformas de ventas jugarán un papel clave.
Especialmente en un momento donde los pagos digitales continúan una tendencia ascendente entre los consumidores. Según el anterior estudio, la pandemia ha impulsado la adopción de los pagos digitales en España, donde destaca el crecimiento de un 45% los pagos contactless, así como la progresiva adopción de nuevas formas de pago a través del móvil.
Ante este cambio de hábitos los pequeños comercios han visto en los pagos digitales una vía para mantener a flote sus negocios. De hecho, el 68% de los pequeños comercios actualmente afirman que materializan sus ventas a través de estos canales, según una encuesta de Advanced para Visa. Del estudio se desprende que el efectivo empieza a jugar un papel secundario según los comercios encuestados, ya que afirman que esta modalidad de pago supone solo el 26% de sus ingresos por ventas. Por consiguiente, los comercios han incrementado paulatinamente la aceptación de los pagos digitales para dar respuesta a los cambios en los hábitos del pago del consumidor.
El crecimiento del ecommerce
Además de los pagos digitales, aunque muy relacionados con esto, está el papel que ha tenido el ecommerce durante la pandemia, convirtiéndose en el salvavidas para muchas pymes. Esto ha provocado que la idea de digitalización que algunos pequeños empresarios tenían puesto en el horizonte más lejano se haya convertido en una carrera a contrarreloj para hacer visible su negocio y aumentar las ventas.
En este impulso por desarrollar plataformas digitales han tenido mucho que ver el apoyo de grandes multinacionales, con más experiencia en lo digital y con herramientas que son necesarias a la hora de crear una tienda online. Es el caso de Visa que ha puesto en marcha la iniciativa «Digitaliza tu Negocio» para que las pymes se inicien en la venta online: desde cómo crear el e-commerce, acceso a financiación pública, cómo recibir pagos online, reputación digital o cómo mejorar la experiencia online de su cliente.
La tendencia a la compra en comercios locales
A la internacionalización que ha supuesto la venta a través de internet, se ha sumado un fenómeno a la inversa: el comercio de proximidad. Muchos españoles se han solidarizado con las pequeñas tiendas de su barrio o ciudad incrementando su consumo en estos locales y ayudándoles a sobrevivir. Las administraciones locales han jugado también un papel fundamental a la hora de incentivar a los ciudadanos a comprar local, a través de descuentos, bonos y otras muchas vías.
Por ejemplo, el Ayuntamiento de Madrid se unió a Visa hace unos meses para apoyar su campaña #DondeComprasImporta e impulsar la digitalización de los pequeños y medianos comercios locales de la capital española. La campaña nació en verano de 2020 con el fin de poner de relieve los esfuerzos que las pymes estaban llevando a cabo para hacer frente a la crisis de la Covid-19.
La recuperación será paulatina y en este contexto las herramientas digitales, los recursos económicos y el apoyo de los socios tecnológicos serán fundamentales para que sigan impulsando sus negocios y puedan afrontar un futuro con mayor optimismo.
