Apple tiene pendiente la renovación del Mac Pro, un equipo profesional que se caracteriza por ofrecer una configuración muy potente a nivel de hardware, aunque con el paso del tiempo ha «envejecido» y se ha visto claramente superado por otras soluciones que no solo ofrecen un mayor rendimiento, sino que además tienen un precio de venta inferior.
Con el lanzamiento del SoC Apple M1, se venía barajando la posibilidad de que la compañía de Tim Cook optase por lanzar un nuevo chip de alto rendimiento que sería el corazón de su nuevo Mac Pro. En varias informaciones (no confirmadas) hemos visto referencias a un Apple M1X con 12 núcleos, y también se ha llegado a comentar que el gigante de la manzana tendría listo un chip con 40 núcleos y una GPU de 128 núcleos. El primero sería capaz de ofrecer un rendimiento enorme, y la segunda podría estar a la altura de una RTX 3070 Max-Q de NVIDIA, al menos en teoría.
El caso es que, ahora mismo, toda esa especulación, y esos rumores, han quedado en una posición bastante complicada, ya que la beta de Xcode 13 incluye referencias claras a los procesadores Ice Lake-SP de Intel, lo que sugiere que la compañía de Cupertino podría actualizar su Mac Pro a los nuevos chips de Intel, fabricados en proceso de 10 nm y capaces de ofrecer un alto nivel de rendimiento. Si necesitáis más información sobre estos procesadores, podéis consultar esta información que publicamos en su momento en MuyComputer Pro.
Si esto se confirma, el nuevo Mac Pro de Apple vendrá configurado con procesadores Intel Xeon Ice Lake de entre 8 y 40 núcleos, y supondría un parón importante en los planes de la compañía de independizarse totalmente de Intel, y probablemente también de AMD, ya que lo más seguro es que, en esa situación, Apple no tenga más remedio que recurrir a las gráficas profesionales dedicadas de AMD.
Esto tiene sentido, y además es fácil de explicar. Una cosa es diseñar un chip de alto rendimiento y bajo consumo que encaje en un MacBook o en un Mac mini, y otra muy distinta dar forma a un chip ARM que pueda competir con un gigante x86 de 40 núcleos con un IPC al nivel de la serie Ice Lake de Intel. Lo primero es relativamente fácil, lo segundo es tan complicado que dudo, incluso, que pueda llegar a ser posible.