Hoy en día, es difícil entender que no tengamos ya una cultura sobre la nube y sus beneficios arraigada, sobre todo por parte de los que ya están en ella. Pero ¿qué pasa con el resto? Tenemos una larga lista de objeciones que no permiten que muchos clientes puedan acceder a este tipo de servicio. Algunas son:
Desde un ERP totalmente “legacy”, desfasado técnicamente, más varios ecosistemas de muchos planetas y satélites que forman el sistema de gestión de la empresa, lleno de herramientas de ofimática, y soluciones “temporales” donde mover, cambiar, o actualizar un elemento implica entrar en una tormenta de incidencias, desconexiones, fallos de sincronización, horas del sistema fuera de juego, etc.
Estos son una serie de síntomas que lamentablemente ocurren más a menudo de lo que desean las empresas, y el incrementar la frecuencia o la gravedad de estos produce inmovilidad, y algo más peligroso, miedo, rechazo al cambio, aferrarse al pasado y a pensar que tiempos pasados fueron mejores.
Si damos un paso para alejarnos y ver la situación desde un punto de vista más general, y comparamos las situaciones que ocurren en diversas empresas, empezamos a encontrar un denominador común a muchas de ellas. Aquel sistema que entró tímidamente hace unas décadas para controlar la nómina, o digamos sencillamente pasar a limpio la contabilidad, se ha convertido hoy en día en la principal herramienta de trabajo en toda la pirámide de empleados y en la principal fuente de la verdad para tomar decisiones.
No se puede renunciar a él, y tampoco se puede crecer sin él, así que la solución no es flanquear lateralmente la situación, sino enfrentarse directamente a ella.
El valor del ERP en la nube
Las empresas por el hecho de tener un ERP revalorizan su valor. Además, estar con un ERP en cloud les proporciona otros beneficios como acceso a servicios que, de otra forma, son muy difíciles de obtener. También otras ventajas, como mejorar el clima laboral con una solución que facilita la labor de sus empleados, la conciliación laboral y el teletrabajo, al mismo tiempo que mejora la imagen frente a sus clientes y proveedores.
Además, les permite incluir nuevas reglas de negocio de forma fácil con sus propios medios. De esta forma, el ERP en cloud y la empresa están siempre relacionados y apuntan a los mismos objetivos, teniendo sus sistemas siempre disponibles en cualquier horario y lugar.
Es empresarialmente complejo no poder gestionar de esta forma. Porque hoy en día, además de un sistema integrado, ya es totalmente necesario disponer de movilidad. Tenemos claro que necesitamos homogeneidad y objetividad en nuestra información para disponer del dato concreto y correcto para la toma de nuestras decisiones, pero es tan o más importante disponer de un sistema totalmente estable, y desde el que se pueda acceder estemos donde estemos.
En Ekon llevamos décadas recogiendo y compartiendo las inquietudes de nuestros clientes, superando los retos que nos proponen, y dando respuesta a sus necesidades. Nuestra cercanía a sus negocios nos permite ser uno más, y además ser el socio tecnológico que busca, diseña, construye, distribuye, mantiene, y cuida de los sistemas de sus clientes.
Dentro del mundo de la nube, la mayoría de nuestros competidores no permiten que las empresas puedan mantener su efecto diferenciador, dotando a sus sistemas en la nube de tan alto grado de estandarización, que es prácticamente imposible posibilitar a sus clientes seguir creciendo y demostrar en el mercado lo que les hace distintos.
En Ekon estamos con nuestros clientes, y estos pueden mantener sus reglas propias de negocio, incorporar nuevas, y mantener la singularidad de sus procesos que les hacen diferentes frente a su competencia. Porque en Ekon, como primer fabricante de software Cloud en España, damos el servicio en la nube directamente, administrando, manteniendo, y cuidando de los sistemas de nuestros clientes de una forma completa y sencilla, económicamente con una cuota por usuario.
Técnicamente, dotando de las últimas funcionalidades a nuestros clientes, tanto funcionales, canales de venta digitales, análisis de datos, o bien de confort y necesidad como el teletrabajo, la movilidad, el trabajar desde dispositivos móviles, el olvidarse de sus sistemas y centrarse en sus negocios.
Un reto como el que nos lanza la situación actual necesita una solución como la que aportamos, sin intermediarios, y sin reparto de responsabilidades. Una ventana única para nuestros clientes que nos permita seguir creciendo con ellos y, como no podría ser de otra manera, marcando también nuestra diferencia con el resto del mercado.
Ekon para MuyPymes.