Cada vez es más frecuente ver como hay emprendedores que apuestan por abrir nuevos caminos a través de la creación de productos o servicios. El emprendimiento forma parte de nuestro ADN ¿o creías que era algo reciente? Y es que, desde hace siglos, las personas hemos tenido la inquietud de emprender, innovar y poner en marcha nuevas ideas. Muchas han sido una auténtica revolución.
Snippet, startup especializada en la creación de videos, ha querido compartir algunas de las historias de emprendimiento en un día en el que se conmemora la aventura de emprender. Han escogido algunas ideas relevantes que han facilitado el avance tecnológico.
Johannes Gutenberg, el inventor de la imprenta
(Alemania, 1399-1468)
Siempre hemos oído que la tecnología permite la viralización del contenido. Podríamos decir, que la imprenta fue de los primeros inventos con un objetivo similar. En este caso, el cambio radical de la difusión de la cultura.
Johannes Gutenberg, platero de profesión, para poner en marcha su invento tuvo que pedir un préstamo. Pensó en fundir en metal cada una de las letras del alfabeto por separado e ideó un sistema para ponerlas una al lado de la otra, sujetarlas y poder imprimir páginas de forma rápida.
Su primera y última gran obra fue la llamada Biblia de Gutenberg. Su valedor no quiso prolongar el préstamo y Gutenberg, arruinado, tuvo que abandonar. A pesar de esto, su nombre siempre será recordado.
Fermina Orduña, primera mujer inventora en España
(España, 1865)
El traspaso de información de una forma rápida y segura, es la labor primordial de la tecnología. Fermina, se obsesionó por un transporte sin riesgos, higiénicos y de la forma más veloz posible del ganado e inventó un carro especial para transportar leche fresca.
La primera mujer española en patentar un invento fue ella y con este, evitó enfermedades típicas de la época.
Walt Disney, el “inventor” del cine de animación
(Estados Unidos, 1901-1966)
Después de ser despedido de un periódico por falta de imaginación llegó a Hollywood con 40 dólares en el bolsillo y una copia de la película Alicia en el País de las Maravillas.
Es el creador de Mickey Mouse, su icónico personaje, y tuvo la idea de hacer un largometraje de dibujos animados. El uso de cámaras inéditas como la multiplano, que daba sensación de profundidad en tres dimensiones le supuso el lanzamiento al estrellato.
Convirtió su compañía The Walt Disney Company en el grupo empresarial de comunicación y entretenimiento más grande del mundo. Y es que Snippet sustenta la tecnología en formatos audiovisuales para el entretenimiento, así que no podíamos obviar a este hombre de éxito, que creyó en sí mismo y en sus posibilidades.
George Eastman, el inventor del carrete de fotos Kodak
(Estados Unidos, 1854-1932)
La democratización de la cultura, la información, los productos o servicios es un fundamento necesario cuando hablamos de programación.
Hijo de migrantes, tuvo una infancia marcada por la pobreza y solo estudió hasta los 14 años. Trabajó como limpiador y mensajero lo que le permitió ahorrar algo de dinero que dedicó a sus inventos. Invirtió todo el dinero que tenía en la compra de una máquina con la que fabricó algunas placas fotográficas, que no salieron bien. Volvió a intentarlo hasta que dio con la tecla acertada. Democratizó la fotografía con la puesta en el mercado de un carrete fácil de usar y al alcance de todos. También fue el creador de la máquina Instamatic, de la que se fabricaron 50 millones de unidades.
Una empresa que nació de la nada y que, pese a sus abarates económicos, terminó produciendo medicamentos durante la pandemia. ¡Nada como reinventarse!
Sean Parker y Shawn Fanning creadores de Napster, el precursor de Spotify
(Estados Unidos, 1999)
No es el nombre de un creador, ni de un empresario. Esta denominación (en español, siestero) corresponde al primer servicio de distribución de archivos de música, creado por los norteamericanos Sean Parker y Shawn Fanning. Ante la dificultad de descargar música, pensaron ¿por qué tengo que comprar un disco entero si solo quiero oír una canción? Ahí empezó su reto.
La idea fue crear un modelo de suscripción que permitiera a los usuarios acceder a esas canciones. Pero, aunque las trabas legales se impusieron y tuvieron que pasar por momentos de cierres y multas millonarias, Napster puso la primera piedra de lo que hoy es iTunes o Spotify.
Una idea arriesgada que tenía futuro, ¿o no?
Jan Koum, el creador de WhastsApp
(Ucrania, 1976)
Durante su juventud y antes de trabajar como ingeniero en Yahoo, sobrevivió gracias a los subsidios que le daba el estado norteamericano.
Apasionado de la tecnología, durante su trabajo como informático en la tecnológica, empezó a gestar la idea de crear una aplicación, tras comprarse un Iphone y comprobar que la App Store será una forma increíble de hacer dinero. El nombre surgió por su semejanza con la expresión “what ‘s up? (¿qué pasa? en castellano).
Vaivenes de la vida quiso trabajar en Facebook pero fue rechazado. Una compañía que años después compraría la creada por Koum por 20.000 millones de dólares.
Y gracias a él, nuestros videos individualizados pueden ser viralizados, de rápido acceso y seguro y accesibles para todo el mundo.
