Los pagos con tarjeta de débito en comercios han tenido un crecimiento del 37% en España durante la crisis del coronavirus. Además, los realizados con tarjeta de crédito han aumentado un 25%, según un estudio elaborado por GFK y publicado por Visa en España, Francia, Italia y Portugal, que analiza el impacto de la Covid-19 en el uso y hábitos de pago en el consumidor.
En este sentido, métodos como el uso de tarjeta de crédito y débito en comercios, que previo a la Covid-19 registraban una tendencia ascendente, tras el inicio de la crisis se han consolidado como los métodos de pago preferidos por los consumidores en puntos de venta físicos.
Los datos publicados recientemente por el Banco de España confirman que durante el tercer trimestre de 2020, las operaciones de compras en terminales de punto de venta (TPV) incrementaron un 16% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Como consecuencia, el uso del efectivo ha caído en los últimos meses, donde la retirada de efectivo en cajeros se ha reducido un 26% durante el tercer trimestre de 2020.
En este contexto, Eduardo Prieto, Director general de Visa en España, comenta: “El incremento de los pagos digitales evidencia que la tecnología contactless es una herramienta que facilita la adopción de estos pagos y que los consumidores confían en su seguridad. En este contexto, para Visa es prioritario garantizar pagos seguros tanto en puntos de venta físicos como en línea y por ello trabajamos en permanente colaboración con los bancos para combatir el fraude y proteger los datos de los consumidores gracias a la tecnología más avanzada, que nos permite detectar el fraude en tiempo real”.
Como consecuencia de esta evolución en el comportamiento de los consumidores hacia los pagos digitales, ha hecho que los españoles encuestados perciban una mayor aceptación de los pagos digitales en comercios. En concreto, la aceptación percibida de las tarjetas ha crecido un 57% desde la crisis del coronavirus, un 36% la de los pagos a través del móvil y un 35% la de las Wallets.