Cuando falta poco más de un mes para acabar este atípico año, las empresas deben hacer balance sobre cómo han gestionado la difícil situación en la que nos encontramos. Muchas han debido modificar su modelo de negocio partiendo de estrategias más disruptivas basadas en la digitalización.
Además de poner a sus empleados en el centro como eje fundamental para poder recuperar la actividad. Por otro lado, el teletrabajo ha llegado para quedarse y muchas compañías han implementado de forma oficial esta alternativa, teniendo que reconstruir su cultura corporativa y dotando a los trabajadores del material necesario para poder desempeñar su labor.
Las empresas también han modificado la forma de atender a sus empleados. Los departamentos de Recursos Humanos han sido sometidos a un proceso de reconversión digital, pudiendo así ofrecer nuevas alternativas a la hora de procurar su bienestar en la compañía. Los planes de beneficios se han consolidado y normalizado entre las plantillas. Sin embargo, el trabajo en remoto ha hecho que los empleados no hayan podido disfrutar de sus beneficios físicos; como, por ejemplo, los tickets en papel.
Unos beneficios digitales, les darían la oportunidad de poder sacarles el mayor partido independientemente de si el trabajo es presencial o no. Aunque, a pesar de este cambio de paradigma, aún queda mucho por hacer. Según el informe Estado y Tendencia de los Beneficios 2020 elaborado por Cobee, la plataforma digital que permite
gestionar de forma flexible y totalmente automatizada los beneficios para empleados y empresas, tan solo el 8,5 % de los empleados opina que los planes de compensación actuales de sus empresas son modernos y tecnológicos.
En este sentido, los empleados esperan una evolución. Quieren un único medio de pago para abonar todos los servicios subvencionables proporcionados por la empresa; total flexibilidad para decidir cuánto gastar y cuándo hacerlo; transparencia en el gasto y ahorro en productos y servicios que realmente utilizan; y, por supuesto, controlar la cantidad que ahorran en cada consumo. Pero ¿están las empresas en sintonía con lo que quieren sus trabajadores?
Nuevo reto para el tejido empresarial
Siete de cada 10 empleados opina que su empresa está realizando un gran esfuerzo a la hora de implantar planes de beneficios e, incluso, consideran que es algo por lo que tienen que estar agradecidos. El principal problema reside en que el 70 % considera que la forma de ofrecer estas ventajas no se ha adaptado a la digitalización del momento. Las empresas siguen ofreciendo planes muy basados en aspectos tradicionales, como la comida o el transporte, en un momento en el que los trabajadores quieren alternativas digitales como la formación online, el wellness, etc.
Abrazar el cambio supondría también una oportunidad para las empresas que podrán automatizar y reducir la carga administrativa de los departamentos de RRHH; llevar a cabo un proceso de contratación sencillo, sin grandes inversiones; y, también, una motivación a la hora de mejorar los ratios de adhesión de la plantilla a los planes. Por otra parte, los beneficios tienen un papel crucial a la hora de captar y retener talento.
El 44,5 % de los encuestados toma en consideración este tipo de ofertas antes de aceptar un nuevo empleo, y para el 20,4 % tiene un gran peso a la hora de decidirse. De esta forma, la empresa puede fidelizar, ahorrando considerablemente respecto a las constantes subidas de sueldo y dando a los trabajadores lo que verdaderamente necesitan. Más del 67 % de los cargos directivos reconocen que les merecería la pena sacrificar parte de su sueldo a cambio de mayores ventajas y productos con valor añadido.