Una de las cuestiones más importantes que ha generado el anuncio del SoC Apple M1 está vinculada al rendimiento que ofrecerá con aquellas aplicaciones que no soporta de forma nativa, es decir, cómo se comportará cuando tengamos que ejecutar aplicaciones mediante la capa de emulación Rosetta 2.
Todavía quedan muchas cosas en el aire, ya que Apple no ha sido todo lo clara que nos gustaría, pero sabemos que están trabajando para crear un ecosistema de aplicaciones universales, y que es solo cuestión de tiempo hasta que logren alcanzar esa etapa de transición óptima en la que no tendremos que lidiar con pérdidas de rendimiento debido a la emulación.
Ya conocemos todas las claves del SoC Apple M1, es un chip potente y eficiente, ¿pero qué rendimiento podemos esperar al trabajar con aplicaciones no nativas, es decir, con aplicaciones x86? Microsoft nos ha dado algunos detalles bastante interesantes, y parece que la cosa no es para nada preocupante.
Según la compañía de Redmond, la suite Microsoft Office todavía no ha sido optimizada para trabajar de forma nativa con el SoC Apple M1, y por ello recurre a la capa de emulación Rosetta 2. Esto genera un retraso de hasta 20 segundos al abrir una de las aplicaciones que integra dicha suite de ofimática, pero en teoría esto es algo que solo ocurrirá la primera vez que abramos dichas aplicaciones. En las próximas ejecuciones, los tiempos de inicio serán mucho más rápidos.
Microsoft no ha concretado como de «rápidos» serán esos nuevos tiempos de inicio, pero está claro que tampoco debemos esperar un inicio casi instantáneo, ya que el sistema seguirá recurriendo a Rosetta 2, y continuará sin estar debidamente optimizado para aprovechar el potencial real del SoC Apple M1.
Por suerte, la compañía ha dejado claro que está trabajando para adaptar su ecosistema de software al nuevo SoC Apple M1, y que es solo cuestión de tiempo hasta que sus principales aplicaciones se conviertan en universales, lo que significa que podrán correr de forma nativa tanto en CPUs x86 como en CPUs ARM. No sabemos cuándo completarán esa transición, pero creo que plantean una visión a corto plazo, lo que supondría, como mucho, unos meses.