Uno de los grandes cambios que ha traido la globalización, así como la entrada en la Unión Europea y el cambio de siglo ha sido la posibilidad de viajar a nivel mundial sin excesivas dificultades. Lamentablemente, la pandemia del COVID-19 puede cambiar esa tendencia y provocar que los viajes a partir de ahora vayan a ser a sitios más cercanos.
Puedes dedicar décadas a construir un sueño y el mundo puede destruirlo con algo tan aleatorio como una pandemia de un virus desconocido. Eso fue justamente lo que le pasó a Brian Chesky, el CEO de Airbnb, con la llegada del virus este año.
“Tardamos 12 años en construir Airbnb y lo perdimos casi todo en cosa de cuatro a seis semanas”, dijo Chesky en una entrevista en la CNBC, recogida por Entrepreneur. Con estas contundentes palabras, el empresario indicó que este año la compañía estaba preparando su salida a bolsa y ahora ese proyecto está en el aire.
Chesky también indicó que Airbnb se enfrenta a un futuro incierto debido a los temores de rebrotes que ya se están experimentando en todo el mundo. “El turismo tal y como lo conocíamos se ha acabado. No quiero decir que el viajar se haya terminado, sino que el modelo que conocíamos ha muerto y no va a volver”.
El CEO puntualizó que la gente quiere salir, pero también sentirse segura. Según Chesky, las personas “no quieren subirse a un avión, ni viajar por negocios, ni cruzar fronteras”, lo que a su parecer impulsará el turismo doméstico cercano a los centros urbanos.
“Vamos a subirnos a nuestros automóviles, conducir unos cuantos kilómetros a una pequeña comunidad y quedarnos en una casa”, dijo Chesky quien señaló que al menos en Estados Unidos, Airbnb ya se está recuperando, aunque no quiere tener “falsas esperanzas y que su empresa no está absolutamente fuera de peligro”.