La memoria RAM, siglas en inglés de «Random Access Memory» (Memoria de Acceso Aleatorio), es un tipo de memoria volátil que se utiliza para almacenar datos de aplicaciones y procesos que estamos ejecutando actualmente. Esto evita que el procesador tenga que repetir determinadas cargas de trabajo, ya que éstas quedan resueltas y almacenadas en la RAM, y puede acceder a ellas cuando lo necesite.
La velocidad de la memoria es importante, puesto que determina el ancho de banda que ofrecerá en función de la configuración que utilicemos. La mayoría de los equipos actuales permiten montar memoria RAM en canal único, con un bus de 64 bits, o en doble canal, con un bus de 128 bits. Las configuraciones en doble canal ofrecen mayor rendimiento, pero solo se nota una diferencia importante en casos concretos.
Aunque la velocidad importa, cuando hablamos de memoria RAM la capacidad debe ser nuestra principal preocupación. Si nuestro sistema no cuenta con una cantidad determinada es probable que no podamos ejecutar determinadas aplicaciones y programas, o que no disfrutemos de un buen rendimiento, ya que la memoria se llenará muy pronto y tendrá que vaciarse y volver a cargarse en ciclos relativamente cortos, aumentando la carga de trabajo que deberá soportar el procesador.
Podemos liberar memoria RAM de una manera relativamente sencilla, pero si tenemos una cantidad muy baja no hará milagros y no nos quedará más remedio que plantearnos una ampliación a corto plazo si queremos mejorar el rendimiento del sistema.
¿Cuánta memoria RAM necesito?
La cantidad de memoria RAM que necesitarás depende del uso que vayas a dar a tu equipo. No hay una respuesta universal que sirva para todo el mundo, pero sí que podemos fijar una serie de niveles de referencia que os ayudarán a tener claros los baremos en los que debéis moveros según el trabajo que queráis sacar adelante.
Tened en cuenta que algunos equipos, portátiles principalmente, no permiten ampliar la memoria RAM, así que es mejor comprarlos con una cantidad que supere nuestras necesidades actuales, ya que así aseguraremos una larga vida útil. Sin más, estos son los niveles que debemos tener claros:
- Equipos con 2 GB de RAM: nivel básico, permite trabajar con programas de ofimática sencillos y navegación web.
- Equipos con 4 GB de RAM: nivel medio, buena experiencia en ofimática y navegación web con multitarea moderada.
- Equipos con 8 GB de RAM: es un nivel óptimo. Permite multitarea avanzada y el uso de aplicaciones intensivas.
- Equipos con 16 GB de RAM: con esta cifra podremos sacar adelante casi cualquier tipo de tarea, incluyendo edición de fotos y vídeo.