En el mundo se producen todos los días 135 millones de bolígrafos. Todos ellos fabricados con plástico y un grave impacto medio ambiental. ¿Te imaginas tener en tus manos un lápiz que tras meses de uso, puede convertirse en una planta?
Es lo que proponen los chicos de Sproutworld, que para luchar contra el uso indiscriminado del plástico, traen a España sus lápices sostenibles. Cada lápiz contiene en su interior una cápsula que contiene semillas de una verdura o una planta, de forma que al utilizarlos se reduce su impacto ecológico. Se puede elegir entre 10 semillas diferentes: albahaca, tomillo, cilantro, girasol, tomate cherry, margarita o clavel.
Desde su lanzamiento hace tres años, Sprout ha conseguido vender más de 1o millones de lapices. De origen danés, la compañía se ha extendido a más de 60 países de todo el mundo, convirtiéndose así en todo un símbolo en la defensa del medio ambiente.
El lápiz fabricado de forma 100% sostenible sin generar residuos que puedan perjudicar a la naturaleza. Y como explican sus responables, de cada árbol que utilizan son capaces de fabricar 170 mil unidades de lápices Sprout.
SproutWorld ha conseguido aumentar año a año sus cifras de facturación. En 2017 consiguieron facturar 12 millones de euros en 2017 y este año 2018 se espera que la cifra aumente hasta los 2,5 millones de euros. La demanda de soluciones más sostenibles y ecológicas hace que la compañía siga creciendo y ya tiene en marcha nuevos proyectos con la misma filosofía para diferentes sectores como el del maquillaje, la belleza o el bienestar.