Ser sincero y ser natural. Ahí reside el secreto para ser un influencer y tener éxito. Al menos esa es la opinión del responsable de comercio de Divimove España, Miguel Villamizar.
Villamizar ha asegurado, en declaraciones a EFE, que los influencers no son una moda pasajera, sino un fenómeno que ha existido siempre, “sólo que antes eran personas contratadas por cadenas o programas de radio y televisión”.
Sin embargo, los influencers nativos son personas individuales e independientes a las que la tecnología les ha permitido crear un medio para distribuir su mensaje, ha detallado.
El responsable de comercio de Divimove ha asegurado que el éxito del fenómeno influencers proviene de su cercanía con la audiencia. “El éxito inicial sucede por la sinceridad y lo auténtico que es el influencer”, ha dicho.
“Nos hemos dado cuenta de que cuanto más sofisticada es la producción, peor funciona porque la gente lo que quiere ver es la cercanía y pensar que se está grabando por su cuenta en su casa. Esa intimidad no la vemos en la televisión o en la radio”, ha añadido.
Villamizar ha explicado que, inicialmente, no se tenía en cuenta que el influencer “dice lo que piensa”, para bien o para mal, sin ver cómo eso podía impactar en rentabilizar su producto; mientras que ahora “empezamos a tener una serie de influencers que ya dependen de esa rentabilidad y en el momento que ven que su sinceridad puede entrar en conflicto con la rentabilidad, se empiezan a autocensurar y pierden un poco lo fresco”.
Esta profesionalización de los influencers les acerca a los medios convencionales, de forma que se ven limitados porque la audiencia es diferente a la que tenían en sus redes sociales.
Además, ha destacado que esta profesionalización se está llevando a cabo en todos los sentidos, por lo que empiezan a relacionarse con grandes marcas y empresas que quieren integrar sus mensajes en los contenidos de los influencers.
Villamizar ha advertido de que lo influencers “más grandes” se van a convertir en medios convencionales, pero también entrarán otros nuevos “con la misma frescura” y que continuarán en las plataformas de redes sociales que permiten a cualquier persona tener una voz y difundirla a cierta audiencia.
Un nuevo modelo de negocio: las agencias de influencers
El éxito del fenómeno influencer también ha dado lugar a nuevos negocios como las agencias de publicidad especializadas en marketing de influencia, como es el caso de Divimove.
Estas agencias sirven de intermediario entre las marcas y los influencers, una relación que suele ser “un poco tensa” porque ninguna de las dos partes sabe cómo comportarse, según ha afirmado Villamizar.
Por un lado, la marca espera del influencers que se comporte como un medio convencional.
“Cuando una marca se dirige a una revista, a un programa de radio o a un canal de televisión, tiene todo un departamento de marketing, de ventas o de contenidos con el que tratar. Pero el influencer es solo una persona que, normalmente, trabaja por su cuenta”, ha explicado Villamizar.
Por otro lado, “el influencer ve a la marca como dinero, quiere rentabilizar su proyecto y quiere que le deje hacer las cosas por su cuenta, pero muchas veces no sabe cómo integrar eso de una manera orgánica en sus contenidos”.
Por ello, Villamizar ha destacado la necesidad de un intermediario que conoce el mundo del anunciante y también el del influencer.
ASMR, ¿el futuro de los influencers?
En relación a las próximas tendencias, Villamizar ha destacado el ASMR (Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma, por sus siglas en inglés), una técnica basada en una serie de sonidos, texturas, susurros y formas de hablar que impacta en el cerebro para relajarlo.
“Hay ciertos youtubers que solo trabajan ASMR, pero en España aun no se está haciendo”, ha señalado.
Además, ha asegurado que aun quedan mucho nichos de contenidos que todavía no se han explotado, e incluso “se están empezando a crear nichos que no podemos ni imaginar”.
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