Las mujeres tiran del carro. Al menos en lo que al colectivo de los autónomos se refiere. Es lo que se desprende del informe ‘Mujer autónoma 2017’ elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) con motivo del Día Internacional de la Mujer.
El colectivo femenino es el impulso principal del crecimiento del régimen de autónomos en España. En 2017 se registraron un total de 1,2 millones de autónomas en el RETA, lo que supone un incremento del 2,2% respecto a 2008, frente al descenso del 10,1% en el caso de los hombres en el mismo periodo. En este sentido, en 2017 el total de autónomos registrados fueron 3,2 millones.
Si hacemos la clasificación por comunidades autónomas, hay que destacar que todas han perdido hombres en sus afiliados al RETA en estos diez años exceptuando Ceuta y Melilla con un crecimiento del 15,6% y del 37,3% de varones respectivamente. Según se desprende del informe, la Comunidad de Madrid es, tras Canarias (2% más) y Baleares (2,1% más), la región que más autónomos masculinos ha sumado con un 1,7% más respecto al año anterior.
Respecto a 2016, Ceuta fue la comunidad con un mayor crecimiento de mujeres con un 4,9%, seguida de la Comunidad de Madrid con un 2,8% más. Si hablamos de la última década, el ranking lo lidera Canarias, con un 18,1% más, seguida de la Comunidad de Madrid, con un aumento del 14,3% y de Andalucía con un incremento del 9,8%.
«Estos datos acaban con el mito de que los hombres emprenden más que las mujeres. La tendencia de que las mujeres creen su propio empleo seguirá creciendo en el futuro”, afirma Soraya Mayo, secretaria general de la ATA.
A pesar de este crecimiento femenino, el peso de la mujer autónoma en España, a 31 de diciembre de 2017, es aún inferior al de los varones y representan el 35,3% del total de autónomos registrados en el RETA.
Todas las comunidades siguen esta línea a excepción de Galicia y Asturias. Las dos regiones del noroeste son las comunidades en las que el empleo autónomo femenino tiene mayor peso. Son las únicas que superan la barrera del 41% del total de autónomos, un 41,2% y un 41%, respectivamente.
En el polo opuesto tenemos Castilla la Mancha, la comunidad autónoma donde menor peso tienen las mujeres con respecto al total de autónomos (representan un 30,2% del colectivo) a pesar de sumar un 5% de autónomas en la última década.
En cuanto a los autónomos extranjeros, suponen un 9,4% del colectivo total nacional. En este sector las mujeres sí que son mayoría. Entre el total de trabajadores nacidos fuera de España, superan en representación a los hombres con un 36,6% frente al 35,3% de varones. Extremadura es la comunidad autónoma con mayor registro de autónomas extranjeras, con un 43,9%, seguida de Asturias y Castilla y León. A la cola de la lista se encuentran Navarra y el País Vasco.
Sectores con mayoría femenina
Hay sectores en los que las mujeres son más numerosas que los hombres, si hablamos de autónomos a nivel nacional. Es el caso del comercio (28,3% mujeres, 20,4% hombres), la hostelería, con un 10,3% de mujeres frente a un 8,4% de hombres autónomos y las actividades profesionales, científicas y técnicas donde las mujeres autónomas copan el 9,9% del total de autónomos.
El perfil de mujer autónoma tiene entre 35 y 55 años. “Esto rompe la idea de que es difícil compatibilizar trabajo y familia. El número de mujeres mayores de 65 años se ha incrementado en 2,3 puntos, porque al incorporarse más tarde a la vida laboral se tienen que jubilar también más tarde”, asegura Soraya Mayo.
España se encuentra por encima de la media europea, en cuanto a presencia de la mujer en el colectivo de trabajadores por cuenta propia. Según datos de Eurostat, en nuestro país hay un 32,8% de féminas, mientras que la media continental es del 32.1%.
Quizás también te pueda interesar: