La petrolera lo tiene claro: el pago por móvil es el futuro y por ello cuenta con su propio canal, Waylet. Con la idea de relanzar este sistema acaba de adquirir el 70% de Klikin, una startup que ha desarrollado una plataforma digital de gestión, reserva y pago de promociones para conectar negocios locales con clientes. Pretenden que Waylet “se convierta en un referente en pago y fidelización para todo tipo de comercios y crecer internacionalmente”, apuntan desde la compañía.
Klikin supone una oportunidad estratégica para Repsol, que quiere que su canal móvil de pago se convierta en un medio universal que se utilice más allá de las estaciones de servicio de la compañía energética. La startup integrará su negocio actual con la nueva versión de Waylet. En estos momentos Klikin está especializada en comercialización en el sector de la restauración e una plataforma para gestionar pedidos, promociones y reservas. “Queremos aumentar la diferenciación y aportar más valor y satisfacción a los clientes”, señala Antonio Brufau, presidente de Repsol. Este destaca que la petrolera está en proceso “permanente de transformación y adaptación de sus modelos y formatos”.
Waylet se lanzó a mediados de 2017 con el propósito de facilitar los pagos a través del móvil en sus estaciones de servicio. La aplicación permite interactuar con sus clientes para ofrecerles promociones y descuentos personalizados. Se da recomendaciones sobre rutas y se facilita información práctica.
Esta no es la primera operación de tales características de Repsol. La compañía petrolera cuenta con acciones en las plataformas colaborativas WeSmartPark y DriveSmart, ambas empresas españolas punteras en el desarrollo de herramientas digitales de movilidad. La primera se ocupa de conectar plazas vacías y conductores que buscan aparcamiento y la segunda comparte, a través de su app gratuita, retos y recompensas con sus usuarios para premiar la conducción segura.
