El seguro de fallecimientos juega un papel protagonista con respecto a los sepelios en España, donde el año pasado se hizo cargo del entierro de 243.000 personas, el 60% de los fallecidos en el país. Esto convierte al seguro de decesos, tras el de automóviles, en el más contratado.
Esta es una de las conclusiones más importantes según se desprende del Informe Estamos Seguros 2016 elaborado por, la patronal aseguradora Unespa: 21 millones de personas de los 46,5 millones de residentes en el país están protegidas por una de estas pólizas.
La causa principal de la importancia del seguro de decesos se debe a que en España el envejecimiento avanza de forma acelerada, pues en menos de treinta años las personas mayores de 65 se han duplicado llegando a ser un 17% de la población total según la Fundación General CSIC. La edad de la contratación de seguros disminuyó entre 2014 y 2016 hasta posicionarse en los treinta años con el objetivo de cubrir garantías de salud y protección jurídica.
Según el director de operaciones de Meridiano Seguros, Carlos Álvarez, el aumento de la contratación del seguro de decesos “reflejan la concienciación por parte de la sociedad de contar con un seguro a cualquier edad”.
En cuanto al coste de los mismos, estos conllevan desembolsos muy dispares, en función del lugar escogido para dar sepultura al familiar y de una serie de factores que condicionan el importe final, como si es necesario realizar un traslado o el tipo de ataúd que se elija.Sin embargo y aunque haya precios muy diferentes el coste promedio por cada sepelio es de 3.200 euros y 3.600 euros según la OCU.