Dos fontaneros valencianos han diseñado SmartWater, un dispositivo de agua que puede llegar a ahorrar cerca de 500 euros al año a una familia y hasta 4.500 euros a un hotel.
El sistema reduce a la mitad el gasto de agua, el 20 % de la energía y el 30% de las emisiones de CO2 en cualquier acción cotidiana que consuma agua caliente como ducharse, lavarse las manos o fregar los platos, un gesto que puede ser casi continuo en instalaciones profesionales como establecimientos hoteleros, campings, peluquerías y gimnasios.
¿Cómo funciona SmartWater? “En lugar de abrir el grifo y dejar correr agua hasta que se caliente, apretamos un botón del dispositivo y cuando está caliente se ilumina un led rojo. A partir de ese instante el agua está ahí preparada a la espera de que se abra el grifo y salga directamente el agua caliente. Además, el agua fría que deja de salir se almacena en un depósito y puede ser utilizada para otras acciones que no requieran agua caliente, como lavarse los dientes”, explica Rafael Rodrigo, que es el creador del invento, junto a Francisco Pelegero.
Así, además de los hogares, los sectores que pueden verse más beneficiados por este dispositivo electrónico son los hoteles, las peluquerías, los gimnasios, las ingenierías energéticas y las navieras. Para una vivienda con una media de ocho usos diarios entre duchas, lavados de cara y labores en la cocina, la estimación de ahorro anual con SmartWater es de 488 euros. En una peluquería la cifra anual asciende a 1.222 euros y en un gimnasio con 50 actuaciones al día el ahorro es de 3.065 euros al año. Una ciudad deportiva o un hotel pueden amortizar 4.585 euros.
La idea surgió hace 15 años para paliar el despilfarro diario de litros de agua y hoy, no solo termina con ese problema sino que ahorra ingentes cantidades de energía y emisiones contaminantes. Y es que SmartWater, que se comercializa bajo la marca IDI, tiene también conciencia ecológica.