Su empresa ha roto con los convencionalismos de los horarios rígidos y mantiene una preocupación por la calidad de vida de sus empleados. La remuneración de los más de cien trabajadores no baja de los 1.300 euros al mes, pero durante la semana tienen acceso a yoga, crossfit e incluso ping pong para romper el estrés.
Carlota Pi es la fundadora de HolaLuz, una comercializadora de energía eléctrica de origen 100% renovable, que tras seis años de actividad cuenta con 90.000 clientes. Compra la electricidad en subasta y se la ofrece a clientes a mejores precios que las compañías tradicionales. Ingeniera industrial y madre de tres hijos, lleva grabado a fuego en su ADN las tres palabras mágicas del emprendimiento: “nada es imposible”.
Se ha fijado el ambicioso objetivo de multiplicar por cinco su base de clientes en sólo dos años y alcanzar los 450.000 a finales de 2019. Pi confiesa con orgullo que HolaLuz cuenta ya con financiación ajena después de seis años de actividad. Un espaldarazo a su trayectoria. Su compañía, fundada junto a sus dos socios, Ferran Nogué y Oriol Vila, ha dejado de ser una startup, para convertirse en una auténtica realidad en el panorama energético español.
Pi presume de dos cualidades de su actividad: que su producto es energía renovable y el ahorro de costes que garantiza a sus clientes. Los particulares pagan 100 euros menos en su factura de la luz al año, el equivalente a una factura mensual. La pyme que supone uno de casa seis clientes de HolaLuz, se ahorra casi la tercera parte de su factura energética, comentaba recientemente esta licenciada en Ingeniería Industrial.
A finales del año pasado, Carlota Pi recibió el premio Dona TIC 2016 en su modalidad de Emprendimiento, un galardón creado como llamada de atención sobre la necesidad de contar con un mayor plantel del de mujeres en el sector tecnológico.
Master en Métodos Matemáticos para Mercados Financieros por la Politécnica de Catalunya y Executive Master Business Administration (EMBA) por la Universidad de Navarra, su trayectoria profesional se inicia en el gigante alemán de suministro eléctrico RWE, en el que ocupa diversos puestos durante cuatro años.
En Nexus Energía es nombrada directora de Desarrollo de Negocio, posición que ocupa durante otros cuatro años. En enero de 2011 funda HolaLuz. Los últimos 13 años ha desarrollado también funciones docentes en el instituto de formación continua IL3 de la Universidad de Barcelona.
Un modelo de emprendimiento muy particular
El estilo de Carlota Pi en el mundo de la empresa constituye una sorpresa constante. Desde la primera aproximación a esta emprendedora que no ha perdido la sonrisa durante tantos años de crisis. Los primeros cien clientes de su startup energética los consiguió de una forma única: invitó a su casa a los amigos de ella y sus tres socios para ver un partido del Barça de la Champions. El acontecimiento exigía como entrada la factura de la luz de cada uno de los asistentes, que pasaron a ser clientes de HolaLuz.
La estrategia de crecimiento de la compañía se ha fundamentado en dos acuerdos. Uno con ING, por el que el banco holandés recomienda HolaLuz a sus clientes, y la búsqueda de financiación a través de la consultora Crea Inversión. El banco proporcionará más de 200.000 clientes nuevos, según las estimaciones de PI. A través de la consultora especializada en la búsqueda fondos (préstamos bancarios, socios o capital alternativo) ha conseguido financiación por importe de 10 millones de euros para la expansión de la empresa.
