Uno de cada cuatro franquiciadores comete fallos al planificar su expansión. El 25% de las franquicias reconoce fallos en la estructuración del concepto de negocio. Son datos del libro ‘La Franquicia’, elaborado por una consultora especializada en este tipo de colaboraciones empresariales, T4 Franquicias.
La realidad demuestra que este sistema no gusta a todo el mundo pero es cierto que funciona muy bien y tiene no pocas ventajas para quienes quieren invertir o poner en marcha su propio negocio: amparo de una marca consolidada –o debería–, estrategia de éxito probada, imagen corporativa creada y reconocida, menor inversión inicial que cuando se emprende de manera autónoma.
En España, la Asociación Española de Franquiciadores contabiliza un total 1.232 enseñas que gestionan una red total de 65.810 establecimientos franquiciados. La facturación en 2015 fue de 26.000 millones de euros. Es decir, rentabilidad, haberla hayla. Lo importante es saber separar el grano de la paja y para ayudar a seleccionar aquellas ideas que realmente pueden ser viables os recogemos los aspectos principales a tener en cuenta. Es un decálogo para no equivocarse en la elección de una franquicia, con la colaboración de beFranquicia, una consultora especializada en este tipo de redes.
- Examen de conciencia: ¿Seré capaz de adaptarme a las normas del sistema? No todo el mundo es bueno para emprender, como tampoco todos los emprendedores son potenciales franquiciados. Hay que ser consciente de que deberemos ajustarnos a unas normas de actuación y no salirnos de las reglas. ¿Estamos dispuestos a ello?
- Seleccionar la actividad que más nos conviene. Piensa en tus gustos y preferencias y en tu experiencia y formación. Todo suma. Lo ideal es optar por algo de lo que sepas y que además sea un sector que te interese.
- Recursos para invertir. Las inversiones iniciales varían mucho de una enseña a otra. Según tu presupuesto habrá algunas que tal vez sean inalcanzables para tus posibilidades. Haz un análisis de tu capacidad financiera y en base a ello empieza a investigar cuál de las que te interesan se adecuan a esos recursos.
- Documentarse sobre el mundo de la franquicia. Es importante conocer cómo funcionan, que nos faciliten todos los datos que puedan, tema legal y financiero, etc. Existe un Registro de Franquiciadores y está la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), que seguro os atenderá lo más rápidamente posible.
- Visitar a los propietarios de las cadenas que nos interesen más. Nada como un cara a cara para conocer mejor si estamos ante el negocio de nuestras vidas. Ver las instalaciones, la relación con el franquiciador –cómo será–, incluso conocer a otros franquicia dos.
- Acudir a eventos y ferias sectoriales. A día de hoy se celebran algunos encuentros de franquicia donde podemos encontrar una amplia oferta de enseñas a las que sumarse. Es una manera de ir entrando en contacto con la oferta existente. Una de las referentes tiene lugar en Madrid, Expofranquicia.
- Visitar a franquiciados. De esto ya os adelantábamos en el punto 5. Es muy recomendable ir a locales que ya estén operativos y conseguir conversar con miembros de la red. Es la mejor manera de tomar le la temperatura a este emprendimiento. Conseguir que nos digan cómo funciona todo es un aval para decidirte por una u otra firma.
- Si eres el primer franquiciado… ¡Dale más importancia al punto 4 y 5! Está bien saber la experiencia del franquicia e incluso contactar con asesores dentro del sector donde vaya a iniciarse la empresa franquiciadora para ver el punto de vista de estos. Recaba toda la información que encuentres y puedes preguntar por referencias en la AEF, pues igual se trata de un profesional que ya ha intentado otros proyectos franquiciados.
- Contrato revisado y entendido antes de firmar. Normalmente se firman contratos por cinco años pero bueno, más importante que todo eso es el hecho de entender a la perfección lo que se va a firmar y estar de acuerdo con ello. No dudéis en consultar con abogados especializados en franquicias para que puedan darnos su punto de vista y resolver posibles dudas.
- La ubicación del negocio, clave principal. Dónde está situado el establecimiento, la oficina. Este factor suele ser muy importante a la hora de que algo triunfe o fracase. Dedícale el tiempo que necesite el conseguir un lugar realmente interesante y toma como una inversión el hecho de que pueda que tengas que abonar un alquiler más alto que en otras zonas. Merecerá la pena la diferencia. Cuenta con el apoyo y asesoramiento del franquiciador, que normalmente deberá dar el visto bueno al emplazamiento seleccionado.
La franquicia como fórmula de negocio da excelentes resultados pero es cierto que la buena marcha de la unidad franquicia dependerá de diversos factores. “En ocasiones hemos comprobado que la elección no se hace correctamete”, señala Carlos Blanco de Córdova, fundador y socio director de BeFranquicia. Es por ello, nos explican, que han querido elaborar una guía “para ayudar y dar unas pautas útiles y prácticas a cualquier candidato a franquiciado, antes de abrir una franquicia”.