Más de la mitad de las empresas, en concreto el 53%, reconoce que tiene en plantilla a trabajadores que practican el presentismo laboral, es decir, que aunque están presentes en su puesto de trabajo, dedican parte de su tiempo a cuestiones que no están relacionadas con su actividad profesional.
Este porcentaje es siete puntos superior al de un año antes, según un estudio de Adecco. Entre el 53% de las empresas que sí reconoce tener trabajadores presentistas, este fenómeno sólo afecta a pocos o algunos empleados. La práctica presentista más habitual es la utilización de Internet, e-mail y redes sociales para asuntos personales y en horas de trabajo, tal y como constatan el 97% de las empresas que han detectado presentismo en sus empleados. Esto se traduce en que normalmente los mismos empleados, alargar innecesariamente su jornada laboral para cumplir con el resto de sus obligaciones.
Las pausas para cafés, desayunos o almuerzos (93%), la entrada tardía o salida temprana del puesto de trabajo (93%), las ausencias breves y repetitivas por otros motivos (88%) y el tabaquismo (80%) son otras de las formas que en cierta manera podrían catalogarse de presentismo.
Los métodos de control del presentismo más utilizados son el control de los horarios de entrada y salida (88%), las restricciones en el uso de Internet (29%), las restricciones del correo electrónico (23%), el apagado de luces (7%) y el establecimiento de horas límite para las reuniones (3%).
El informe revela que el perfil del trabajador presentista se corresponde con el de hombre o mujer, indistintamente, mayor de 35 años, que tiene un contrato indefinido y a tiempo completo.
Aunque la flexibilidad horaria es uno de los métodos más eficaces para combatir este fenómeno, el 20% de las empresas no ofrece flexibilidad a sus trabajadores y el 46% sólo la aplica a menos del 25% de la plantilla. En este sentido, Adecco aprecia importantes diferencias entre las pymes y las grandes empresas. Mientras que seis de cada diez pymes no ofrecen flexibilidad o lo hacen con menos del 10% de los empleados, el 45% de las grandes compañías aplican medidas de flexibilidad en más de la mitad de la plantilla.
Así, Adecco concluye que las empresas españolas prefieren implantar sistemas de control y restricciones que flexibilidad horaria, pese a que la mayoría de trabajadores se comporta responsablemente compensando las horas de presentismo, como afirma el 66% de las empresas en las que no se han implantado medidas de flexibilidad.
En el estudio se subraya que la falta de flexibilidad y la escasa aplicación de mecanismos de conciliación afectan de forma especialmente intensa al periodo de maternidad de las mujeres con hijos menores de 2 años (24%), así como a situaciones de insatisfacción profesional (22%).