Microsoft no quiere dar la batalla del vídeo on-line por perdida. No del todo. No al menos, en el sector empresarial. Y porque no quiere hacerlo, Microsoft Stream es su última apuesta. En Stream los de Redmond han construido una completa plataforma de vídeo que toma prestadas muchas de las funcionalidades que encontramos en productos tan populares como Youtube o Vimeo.
¿Qué tiene entonces de diferente? Básicamente su orientación empresarial. Si en las anteriores cualquier usuario puede subir las monerías de su gato o la última partida que ha jugado en «League of Legends», en Stream podrá seguir haciéndolo…si es que cuenta con el permiso de su organización para ello.
Y es que el objetivo de Stream es que cada empresa pueda tener su propia plataforma de vídeo on-line en la que colgar material de formación, marketing, demo de producto, etc. disponible para los trabajadores y en algunos casos, también para público fuera de la compañía.
Stream convive de momento con Office 365 Video, que aunque tiene una funcionalidad similar, está más enfocado a la productividad y a su integración en grupos de trabajo. En cambio Stream representa la cara amable de la empresa a la hora de relacionarse con sus empleados, que encontrarán un portal que saben utilizar desde el primer minuto y que aspira a convertirse en el gran hub de contenidos audiovisuales de cada marca.
Como cualquier otro documento, un administrador IT podrá otorgar distintos privilegios de acceso a cada vídeo, compartirlo en grupos de usuarios específicos o determinar si el vídeo puede verse en dispositivos móviles, o fuera de la red de la compañía. Los interesados en probar el nuevo producto pueden empezar a experimentar con sus funcionalidades desde su preview pública.
