Hasta ahora los Chromebooks han sido sinónimo de equipos baratos, pensados únicamente para navegar por Internet y básicamente destinados al sector de la enseñanza o en el mejor de los casos, a un usuario doméstico que necesitase un segundo o incluso tercer equipo.
Por supuesto siempre existía la posibilidad de adquirir un fantástico Chromebook Pixel, un equipo sobre el papel a la altura de los mejores ultrabooks pero que pecaba de un precio excesivamente alto (1.5000 euros rebajados posteriormente a 1.000) para una plataforma que básicamente utiliza Google Chrome como base de operaciones.
Sin embargo algo se está moviendo en los últimas semanas en el terreno Chromebook. Google y HP acaban de presentar su Chromebook 13, una preciosidad enmarcada en aluminio cepillado increíblemente delgado (12,9 mm) y un peso muy contenido de 1,29 kilogramos. Emplea una pantalla de 13,3 pulgadas que en su configuración superior, monta un panel desconocido hasta ahora en portátiles Chrome OS: un IPS con resolución nativa de 3200 x 1800 píxeles.
Frente a Celeron, Atom e incluso ARM en sus inicios, HP Chromebook 13 ofrece microprocesadores de sexta generación Skylake, con modelos de ultrabajo voltaje hasta el Core M7-6Y75, que permiten en este equipo hasta 11 horas de autonomía.
Su capacidad de memoria RAM también aumenta frente a generaciones precedentes y se eleva hasta 16 Gbytes. El almacenamiento interno se mantiene en 32 Gbytes aunque con una rápida solución flash eMMC 5.0, tarjeta microSD y el almacenamiento en nube gratuito que ofrece Google para estos equipos.
En su conectividad destacan dos puertos USB Type-C (ambos con capacidad de carga apagado el portátil), un USB 3.1 de tamaño completo, Wi-Fi ac de doble banda, un teclado completo retroiluminado, sistema de audio Bang & Olufsen y webcam 720p.
Un ultraligero premium de altos vuelos que sube el nivel de los Chromebooks con un precio base establecido en 499 dólares y que HP enfoca a consumo, sector educativo y también empresas con TPM 1.2 y otras soluciones de seguridad y gestión