En un mundo hiperconectado, en el que todo lo que suene a IoT recibe financiación es capaz de levantar miles de euros en rondas de financiación, parecen tener sentido ideas como Playbrush, una startup británica que literalmente transforma el lavarse los dientes en un juego de niños.
La empresa que ha conseguido levantar 500.000 euros, propone un cepillo de dientes inteligente que, conectado a un móvil o una tablet a través de bluetooth, puede utilizarse como gamepad para determinados videojuegos.
La idea es que los tres o cuatro minutos que los niños pasan cada día lavándose los dientes sean mucho “más llevaderos” por lo que si pueden aprovechar también este momento para seguir conectados a una pantalla, ¿Por qué no deberían hacerlo?
El dispositivo puede acoplarse a cualquier cepillo de dientes y cuenta con giroscopios que transmiten los distintos “movimientos de cepillado” que realizan los niños al lavarse los dientes, de modo que factores como velocidad o dirección influyan a la hora de superar las distintas “fases” del juego.
Playbrush cuenta con el apoyo del Eastman Dental Hospital de Londres y actualmente cuenta con dos juegos, si bien en el futuro esperan contar con distintas Apps y juegos que permitan completar la experiencia de un buen cepillado de dientes.