Históricamente, Reino Unido ha sido (y sigue siendo) el país más avanzado de Europa a la hora de desarrollar un ecosistema de startups financieras – fintech – que pueda convertirse en complemento o alternativa a las instituciones financieras «tradicionales». El motivo lo encontramos en que actualmente, el 7% de su fuerza laboral está directamente relacionada con servicios financieros de todo tipo, por lo que ha sido fácil crear un caldo de cultivo para un tipo de startups con fuerte foco en el sector de las finanzas.
Si nos centramos únicamente en el segmento fintech, las startups que por así decirlo pertenecen a este movimiento, generan actualmente en el país anglosajón nada menos que 20.000 millones de libras esterlinas, lo cual habla de la fuerza que ya tiene un movimiento que poco a poco empieza a inquietar a los más grandes.
Pero lejos de querer combatir este movimiento, el Tesoro Británico, como informan en Business Insider, acaba de publicar un memorandum en el que muestra su posición sobre lo que considera que debería ser el futuro del fintech y cómo la UE debería evolucionar para convertirse en paraguas de este movimiento. A modo de buenas prácticas para aplicar en el futuro, propone lo siguiente:
Actualizar la legislación, de modo que refleje los avances tecnológicos de los últimos años
Actualmente los productos que entran dentro de la categoría fintech operan bajo la «Distance Marketing Directive», que especifica cómo se venden ese tipo de productos, sea vía on-line o por teléfono, pero que también incluye métodos desfasados u obsoletos como el fax o los diskettes.
En este terreno el tesoro británico sugiere que la directiva debería prepararse para el futuro tecnológico que ya está encarando y que está revolucionando la forma en la que los europeos se relacionan con nuevas alternativas financieras.
Evitar legislación burocrática y prescriptiva, para dejar espacio al crecimiento y la innovación
La legislación debería ser lo suficientemente flexible como para permitir el desarrollo de nuevas startups que puedan competir en el terreno de las finanzas, con las grandes instituciones bancarias o financieras.
Se sugiere flexibilizar las barreras que siguen impidiendo que muchas startups que operan en otros países, puedan llegar a Europa y limitar las políticas proteccionistas que se siguen manteniendo en favor de la vieja banca.
Desarrollar una regulación que combata el lavado de dinero negro a través de monedas digitales (como el Bitcoin), sin que impacte en el negocio legítimo de las empresas fintech.
El hecho de que monedas como el bitcoin ofrezcan un alto grado de anonimato y que por lo tanto, pueda servir para el desarrollo de actividades ilícitas (como el lavado de dinero negro), no debería ser excusa para desarrollar una legislación que con el objetivo de combatir estas prácticas, acabase impactando en la actividad legítima de muchas empresas que trabajan con estas monedas de forma legal .
La tecnología blockchain que se encuentra en la base del bitcoin, ha demostrado ser clave en el desarrollo de muchas startups en el segmento fintech, por lo que una excesiva regulación en este campo podría impactar de forma negativa en el desarrollo del ecosistema emprendedor europeo.
Evitar la sobre-regulación de las carteras virtuales
Al tesoro británico le preocupa también el hecho de que la Comisión Europea quiera aplicar estrictas normas de uso sobre los conocidos como digital wallets, espacios virtuales en los que los usuarios gestionan divisas digitales como el bitcoin.
Asegura la institución británica que la regulación actual que se está planteando para estas empresas, sobrepasa en mucho el riesgo potencial que podría derivarse de un uso fraudulento de los mismos.
Clarificar el uso de divisas digitales como forma de pago para proveedores de servicios, para eliminar redundancias y contradicciones legislativas.
Finalmente, las autoridades británicas solicitan a la Comisión que hagan lo posible por eliminar las contradicciones que actualmente existen entre la E-Money Directive y la Payment Services Directive y que dificultan el desarrollo de muchos servicios fintech.