La crisis económica ha reducido a la mitad el número de empresas innovadoras en España. El gasto público y privado en I+D también ha caído. Son algunas de las conclusiones de un informe elaborado por el doctor ingeniero de Telecomunicaciones y MBA Juan Mulet, recientemente presentado en FEDEA.
El estudio ‘Las consecuencias de la reciente crisis económica para la innovación empresarial española’ apunta que el número de empresas innovadoras en tecnología se ha reducido en un 56% desde el inicio de la crisis, y representan sólo el 0,6% del PIB. Las compañías innovadoras no tecnológicas han descendido un 40% hasta las 32.626 en 2014, y suponen el 1% del PIB.
Por su parte, el gasto en I+D ha disminuido un 13% desde el 2008. En concreto, el gasto empresarial ha bajado el 16% y el público, el 9%. La I+D empresarial ha sufrido “un descalabro” en los últimos seis años, según ha explicado Mulet, ya que el número de compañías de este ámbito se ha reducido un 32%, al tiempo que el gasto en esta partida ha caído en un 16% durante este mismo periodo.
Este decrecimiento varía en función del tamaño de las empresas. El informe concluye que las más afectadas han sido las compañías que emplean entre 10 y 49 trabajadores, que han bajado un 47%, mientras que las microempresas solo han caído un 4% gracias, en parte, a los jóvenes innovadores cuya carrera profesional está ligada a sus nuevas empresas. En cuanto a las del segmento de entre 50 y 249 empleados, han disminuido en un 22% y las grandes en un 16%.
En relación al sector más afectado por la crisis en cuanto a innovación tecnológica, Juan Mulet ha señalado que la construcción ha sufrido el recorte más notorio. En España hay cerca de 18.000 empresas innovadores tecnológicas, de las que 10.275 son empresas de I+D y 4.985 compañías con departamentos de I+D.