La semana pasada os contábamos que Cabify le ganaba la primera batalla al taxi madrileño. La Federación del Taxi de Madrid había solicitado la suspensión cautelar de la actividad de la empresa al considerar que ejercía una competencia desleal.
Sin embargo de momento la justicia ha decidido que dicha reclamación no tiene base legal y habrá que esperar a que se celebre el juicio de fondo para comprobar si las posiciones de los taxistas están justificadas. Para conocer más de cerca en qué momento se encuentra la startup y cómo afecta a este aspecto de la sharing economy hemos charlado con Juan Ignacio García-Braschi, country manager de Cabify en España.
MuyPymes: Un juez ha desestimado la demanda de la federación de taxis de Madrid para que se suspenda la actividad de la empresa de forma cautelar. ¿Por qué se interpone ahora la demanda? Cabify lleva operando en España sin problemas casi cuatro años.
Juan Ignacio García-Braschi: Desde el primer minuto, lo mismo que hacemos en todos los mercados en los que trabajamos es sentarnos con el regulador y asegurarnos que nuestra forma de trabajar encaja dentro de la normativa vigente. Es lo que hicimos que y lo que venimos haciendo hasta ahora.
Es cierto que en nuestro lanzamiento inicial, salimos con un servicio más de nicho, la gama Executive que consistía en vehículos de alta gama y que tenían un precio un poco superior al taxi.
En junio de 2014 lanzamos Cabify Lite que se ha popularizado mucho y ya representa el 85% de nuestro negocio. Es una línea que dentro del mismo esquema de funcionamiento (vehículos con licencia, conductores profesionales, coches de buena calidad) son vehículos de gama media con un precio que en el 99% de los casos, es inferior al taxi.
Yo creo que ahí nos hemos expandido mucho y nos hemos dado a conocer desde este lanzamiento. La denuncia desde el sector del taxi la vinculo con una presencia cada vez más implantada en el mercado y que hemos llamado más la atención dentro del sector.
MuyPymes: Pese a lo anterior, si entramos en el fondo del asunto, la acusación que os hacen los taxistas es que ejercéis una competencia desleal. Tenéis menos revisiones, no estáis sujetos a la misma normativa, las licencias son mucho más caras en su caso… ¿Qué respuesta dais a ese argumento?
Juan Ignacio García-Braschi: La vista que ha tenido lugar que es de medidas cautelares, los jueces no han entrado a desarrollar la cuestión legal del asunto.
Se hace una revisión inicial de si hay lo que llaman “apariencia de buen derecho” o no. El juez ha hecho esa revisión y en el auto deja ver que no hay apariencia de buen derecho y que lo que reclaman los taxistas, tiene toda la pinta de que no tienen razón. Pero no se ha entrado a un fondo que debe juzgarse en el juicio definitivo. Hay unas pautas en el auto, pero no se entra en el fondo.
Las licencias que utilizamos son por supuesto de otro tipo. Son las que se denominan como “Licencias de Arrendamiento de Vehículos con Conductor” .
Están contingentadas (tienen un número limitado) y por ejemplo en el caso de Madrid existen 2.700 autorizaciones. Y tienen una serie de restricciones que los servicios de taxi no tienen. No pueden por ejemplo buscar clientes en la calle.
En nuestro caso no hay problema ya que nosotros competimos en el servicio en que la Ley legítimamente nos autoriza a competir: en el servicio de contratación previa, ya sea telemática o telefónica, lo que tradicionalmente en el servicio del taxi ha sido la radio-emisora. En realidad no estamos haciendo nada muy novedoso. Simplemente hemos aportado esta capa tecnológica para facilitarlo.
En cuanto a inspecciones, el responsable es la Comunidad de Madrid, en su dirección general de transportes y casi te diría que somos de las empresas más inspeccionadas de España. Y me consta que bastantes de nuestros conductores han aportado documentación… mantenemos en cualquier caso un diálogo fluido.
MuyPymes: Lo que sí ha conseguido la presión de los taxistas es que el Gobierno apruebe un real decreto que afecta a los VTC, que prohíbe a servicios como Cabify circular vacíos o coger gente en la calle como hacen los taxistas. ¿De qué manera os afecta este nuevo ordenamiento jurídico? ¿Es algo que se venía haciendo hasta ahora?
Juan Ignacio García-Braschi: La normativa hasta ahora estaba un poco confusa porque había algunas partes de la norma que habían sido derogadas porque eran frenos a la competencia y otras que seguían en vigor… Lo que ha venido a hacer el ministerio es refundir todo, unificar criterios con respecto a lo que dicta Economía.
Había algunos requisitos que se estaban imponiendo a las autorizaciones VTC que se han eliminado, como es el hecho de tener un local, o un domicilio fiscal. Requisitos que ya estaban derogados por vía judicial.
Por el resto, tampoco hay especiales novedades. Las licencias VTC siguen sin poder captar clientes por la calle e introduce una novedad de cara a los conductores, que es que si no tienen un local o un domicilio fiscal, en principio pueden estar parados en cualquier lugar de la comunidad de Madrid.
Impone eso sí una flota mínima de siete vehículos (cosa que cambia ya que antes la mayoría de los que prestaban el servicio eran autónomos). Creo que la nueva normativa era necesaria y la valoramos como positiva porque al final todo lo que sea poner claridad y lógica nos parece bien.
MuyPymes: Hace poco, tuvimos la oportunidad de hablar con representantes de Uber, que realmente lo que pedían era una regulación para fenómenos como el vuestro. ¿Apoyáis que se cree un marco regulatorio?
Juan Ignacio García-Braschi: La compartimentación es un techo, un límite a la capacidad de flota que puede llegar a ofrecer los coches de arrendamiento de vehículo con conductor. Qué duda cabe que tener un marco regularorio más libre, que dé cabida a más competencia es beneficioso para los usuarios.
Creo que en la nueva normativa hay un equilibrio entre intentar ofrecer garantías a los usuarios y no perjudicar el negocio del taxi. Hay un pasivo muy grande que es la inversión de los taxistas en licencias y es un problema complicado, pero sería bueno tener más licencias VTC y más oferta para los usuarios.
MuyPymes: ¿Cómo ha sido la evolución de Cabify en los últimos años? ¿De qué volumen de negocio estamos hablando hasta ahora y qué objetivos os marcáis a corto o medio plazo?
Juan Ignacio García-Braschi: Estamos cerrando con una facturación de 40 millones de dólares anuales.
Acabamos de hacer el lanzamiento en Bogotá (Colombia) y Monterrey y Querétaro en Méjico y estos tres lanzamientos están yendo muy bien. Los crecimientos que estamos viendo en estas ciudades son muy superiores a los que tuvimos en los lanzamientos iniciales.
Lanzar en nuevas ciudades es positivo para Cabify. Vemos mucho potencial de crecimiento tanto en Latinoamérica como en Península Ibérica e islas. De momento no nos planteamos crecer en Europa o Estados Unidos y vamos a seguir apostando por los mercados emergentes.